La voluntad de Dios

Todo cristiano que tenga un firme testimonio de Jesucristo debería saber que Dios nos ama y que nunca nos pedirá nada que no podamos hacer. Seguramente, a lo largo de nuestra vida nos parecerá que, en algunas ocasiones, Él nos pide algo imposible; pero eso jamás sucederá.
En esta vida temporal de probación nuestro limitado entendimiento puede empujarnos a pensar que el Padre Celestial nos ha abandonado, o que no oye nuestras oraciones, incluso que no entiende nuestras necesidades. Cuando éramos niños, ¿no nos sentimos de igual modo hacia nuestros padres?, y cuando el tiempo pasó, ¿no vimos que sus decisiones, por amargas que nos parecieron en su momento, luego fueron beneficiosas para nosotros?
Para obedecer a Dios primero necesitamos amarle. Después comprenderemos que Él siempre querrá lo mejor para nosotros y que nos ayudará y sostendrá de acuerdo a la confianza que pongamos en Su sabiduría. Será necesaria nuestra fe para obedecer y nuestra determinación para seguir adelante cuando todo parezca estar en nuestra contra. Pero Dios nos ha prometido que al final de cada prueba hallaremos bendiciones y conocimiento. Él nos pide mucho, porque desea darnos mucho más.
En el vídeo, un mensaje del Elder D. Todd Christofferson, Apóstol del Señor Jesucristo.

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