La voz que me llamó, una experiencia paranormal.

Publicado el 11 julio 2018 por Carlosgu82

Hace aproximadamente unos 10-11 años (actualmente tengo 17) me encontraba yo con mi madre durmiendo en la misma cama debido a que era muy miedoso como para dormir solo, vivíamos en un pueblo con caminos de tierra, era normal si alguien te contaba alguna que otra historia tenebrosa que había experimentado en tal pueblo, no recuerdo exactamente la hora en que me paso esta experiencia paranormal pero algo que si tenía muy claro es que ya era tarde en la noche y las puertas estaban cerradas.

Estoy acostado con los ojos entrecerrados, listo para soñar cuando de repente escucho una voz  proveniente de afuera de la casa la cual se me hace muy familiar (obviamente me pareció extraño por lo tarde que era), esta voz me llama por mi primer y segundo nombre, puesto que la persona perteneciente de esta voz tenia la manía de llamarme así cuando me pedía algún favor o cualquier otra cosa, siempre se dirigía a mi diciendo mis dos nombres, al escucharlo me paro de la cama a toda velocidad, salgo del cuarto y me dirijo rápidamente a la cocina para abrir la puerta, me encuentro a mi tío y sucede este dialogo el cual recuerdo perfectamente.

Tío: ¿Qué paso, por qué  te levantaste a esta hora?

Yo: Escuche la voz de Zuleima (es el nombre de la persona perteneciente a esa voz que me llamó) llamándome y me pare para abrirle la puerta.

Tío: ¿Estás seguro?, yo no escuche nada.

Yo: Estoy seguro, por algo me pare.

Y procedí a abrir la puerta, cuando abro no veo a absolutamente nadie, únicamente los arboles de afuera, un tanque en el cual almacenábamos agua y mas nada, camino un poco para ver si podía verla a lo lejos (pensé que se había ido) y como era de esperar tampoco vi nada, solo me quedaba un lugar por revisar y era atrás de la casa porque también pensé que se había escondido, entonces iba yo caminando para la parte más obscura, cuando me percate de que podría darme el susto de mi vida si seguía caminando, así que me voltee y entre a la casa, cerré la puerta y otra vez tuve una charla con mi tío.

Tío: ¿No estaba verdad?

Yo: No, ¿cómo sabes?

Tío: Hijo, cuando vuelvan a decir tu nombre y te parezca extraño por cualquier cosa, nunca vayas al lugar de donde proviene esa voz.

No respondí  y me fui a dormir, no quise seguir hablando porque me dio bastante miedo cuando me dijo eso.

Después de ese día no volví a escuchar nada por el estilo.