Catorce colonizadores conviven en el mundo de Delmak-O, incluyendo lingüistas, teólogos, físicos, psicólogos, geólogos y demás expertos.
El mundo de Delmak-O es un enigma, pues se encuentra en su mayor parte sin explorar. Además de esto, los colonizadores pueden mantener un contacto con diversas deidades, mediante el uso de amplificadores y transmisores.
El planeta de Delmak-O se encuentra habitado por extraños seres autóctonos, reales e imaginarios. Siendo los más llamativos, unos enormes cubos gelatinosos llamados tenches. Los cuales duplican cualquier cosa que se les entregue y sólo se comunican utilizando los anagramas del I-Ching.
Algunos de los colonizadores observan una extraña edificación a la cual nombran simplemente "El edificio". Cuando algunos miembros del equipo son asesinados, o pierden el juicio, los colonos restantes se dirigen hacia "El edificio" en la búsqueda de respuestas.
Ésta es una obra menor de Dick, pero su ritmo fluido, su escasa longitud y el sello característico del autor permiten que valga la pena la lectura.
¿Quién debe leer este libro?:
Los fanáticos de Philip K. Dick, o cualquier lector de ciencia ficción que busque una obra con elementos filosóficos y teológicos interesantes. También cuando se quiere probar a este autor, aunque yo empezaria leyendo "Ubik" o "El hombre en el castillo".