San Juan Crisóstomo es uno de los llamados 'Santos Padres de la Iglesia Primitiva', es uno de los Cuatro Grandes Padres de Oriente.
Los Padres de la Iglesia llevan ese título porque debido a sus aportes doctrinales y espirituales pusieron la semilla y sentaron en los primeros siglos del Cristianismo las bases teológicas, doctrinales, litúrgicas y morales de la Fe de la Iglesia Cristiana.
Hasta nuestros días las Iglesias católicos de ritos orientales siguen celebrando la Misa cuyo marco litúrgico se atribuye a San Juan Crisóstomo en el siglo IV.
Estas 24 súplicas al Señor son atribuidas a este gran santo y muchos cristianos en oriente las recitan diariamente.
La tradición oriental afirma que son 24 en alusión a las 24 horas del día, en el sentido de que debemos rogar al Señor a toda hora, aunque claro está que se pueden hacer todas de una sola vez, por ejemplo, al inicio del día.
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Los 24 'Oh Señor' de San Juan Crisóstomo.
1. Oh Señor, no me prives de Tu Bendición Celestial.
2. Oh Señor, líbrame del tormento eterno.
3. Oh Señor, si yo pequé por pensamientos, palabras o acciones, perdóname.
4. Oh Señor, líbrame de toda ignorancia, de la mezquindad del alma y de la dureza del corazón.
5. Oh Señor, líbrame de toda tentación.
6. Oh Señor, ilumina mi corazón oscurecido por los deseos del maligno.
7. Oh Señor, siendo yo un ser humano, soy pecador. Siendo el Señor Dios, perdóname en Tu Amor, pues Tú sabes que mi alma es débil.
8. Oh Señor, envía tu Gracia en mi auxilio, para que yo pueda glorificar Tu Santo Nombre.
9. Oh Señor Jesucristo, inscribe a Tu siervo en el Libro de la Vida y concédeme un fin bendecido.
10. Oh Señor mi Dios, aunque no haya hecho el bien para Ti, sin embargo concédeme, de acuerdo con Tu Gracia, que pueda comenzar a hacerlo.
11. Oh Señor, rocía mi corazón con Tu Gracia.
12. Oh Señor del Cielo y de la tierra, acuérdate de mi, Tu siervo pecador, impuro y frío de corazón, en Tu Reino.
13. Oh Señor, acepta mi arrepentimiento.
14. Oh Señor, no me abandones.
15. Oh Señor, sálvame de la tentación.
16. Oh Señor, concédeme pensamientos puros.
17. Oh Señor, concédeme las lágrimas del arrepentimiento, el recuerdo de la muerte y el sentido de la paz.
18. Oh Señor, concédeme la humildad, la caridad y la obediencia.
19. Oh Señor, concédeme la confesión de los pecados.
20. Oh Señor, concédeme la tolerancia, la magnanimidad y la dulzura.
21. Oh Señor, sitúa en mí la fuente de todas las bendiciones: el temor de Ti en mi corazón.
22. Oh Señor, concede que pueda amarte con todo mi corazón y toda mi alma, y que pueda obedecer siempre tu voluntad.
23. Oh Señor, defiéndeme de las personas y también de los demonios, de las pasiones, de todos los errores.
24. Oh Señor, que creó al todo y que sobre el todo ejerces Tu Voluntad, haz que Tu Voluntad también me tome, yo pecador, por Tu Eterna Bendición. Amén.