El dolor de espalda es uno de los más comunes entre las personas que practican ciclismo. Las causas pueden variar dependiendo de cada persona en concreto, pero casi siempre está relacionado con una mala posición sobre la bicicleta.
Talla de la bicicleta
Que la talla de la bicicleta sea la correcta es fundamental a la hora de no tener problemas en las espalda. Si llevamos una bicicleta demasiado grande para nosotros, nuestro tronco tenderá a ir demasiado inclinado hacia adelante, pudiéndonos causar dolor con el tiempo.
Si la bicicleta es demasiado pequeña ocurre lo contrario, iremos demasiado erguidos, y esta postura también causa dolores.
Generalmente los fabricantes tienen una guía de tallas en las que podemos ver qué talla corresponde para cada altura. En el caso de que estemos en el límite entre una talla y otra es recomendable escoger siempre la talla pequeña.
Altura del sillín
Aunque la talla de la bicicleta sea la correcta, si llevamos el sillín con una altura no adecuada para nosotros también tendremos problemas.
Sillín demasiado alto
Cuando el sillín está muy alto tendremos la sensación de ir colgados sobre la bicicleta. Además estaremos estirando las piernas en exceso y nuestra también ser desplazará incorrectamente.
Esta posición suele generar dolores a nivel lumbar.
Sillín demasiado bajo
En este caso las piernas se quedarán demasiado flexionadas en el pedaleo. Esto, además de cargarnos en exceso los cuadríceps, también provoca dolor en la columna vertebral.
Altura del manillar
Al igual que el sillín, la altura del manillar puede afectar a nuestra espalda.
Manillar demasiado alto
Si llevamos el manillar demasiado alto, nuestro tronco estará demasiado erguido. Esta posición acaba generando dolores en la zona lumbar.
Manillar demasiado bajo
Si por el contrario llevamos el manillar demasiado bajo, nuestro tronco se desplazará hacia adelante y tendremos que soportar parte de nuestro peso con los brazos. Esta posición acaba generando dolores en las cervicales.