Desarrollar para iOS ofrecía mejores perspectivas de negocio, especialmente para aquellos que ofertan aplicaciones de pago. El Android Market estaba tan fragmentado que la mayoría de las aplicaciones eran gratuitas o estaban financiadas con publicidad, y el Windows Phone Marketplace acaba de presentarse a finales del pasado mes de septiembre. En la actualidad, el panorama ya no está tan claro.
Esto es lo que piensa un desarrollador de la compañía Anlock, especializada en aplicaciones educativas para niños de entre 3 y 6 años de edad, diseñadas para smartphones y otros dispositivos portátiles. En marzo de este año, empezaron a comercializar sus programas en la App Store de Apple, y más tarde decidieron probar también con el Marketplace de Windows Phone. Ahora, venden doce aplicaciones en la tienda de Apple y trece en la de Microsoft.
George Karavias de Anlock destaca que facturan cinco veces más con Windows Phone que con iOS. Sus cuentas están basadas en la versión en inglés de “Primeras palabras con fonemas: aprendiendo con animales” para iOS y “Primeras palabras: aprendiendo con animales” para WP; ambas lanzadas a la vez. La causa de estas ventas tan desiguales se explica por el volumen dispar de aplicaciones en catálogo de cada tienda en línea: más de 500.000 títulos para la Apple App Store y más de 40.000 títulos para el Windows Phone Marketplace.
Así, suponiendo que un desarrollador tenga una aplicación de primera y quiera venderla en la Apple App Store, a menos que pueda apoyarla con un plan de marketing bien coordinado, o tenga mucha suerte, lo más probable es que quede enterrada. No sucede los mismo en el Windows Phone Marketplace, donde la recompensa es mayor, concluye Karavias en el blog de Anlock.