Cuando voy al barrio de la Barzola siempre pienso en aquel hombre de 82 años que no tenía fuerzas ni para caminar y aún así mató a su esposa de 14 puñaladas; cuando paso por el cementerio se me eriza la piel con el entierro de Antonio Puerta; en León XIII veo decenas de policías cortando una calle llena de rabia...
Y veo incendios donde ya no hay fuego, inundaciones donde no hay una sola gota de agua; veo detenciones sin que haya policía y salir cadáveres de edificios donde no pasa nada... Veo entrevistas que hice, totales que me hicieron gracia, y los veo sin que haya una sola cámara...
Y, joder, me da miedo pensar que algún día no quede calle en Sevilla que no me diga nada.