Las catacumbas del Teatro El Círculo (III)

Por Libretachatarra


Eduardo Amancio Barnes era una escultor rosarino, nacido en 1901. Autodidacto, Barnes se especializó en arte sacro. Una peculiaridad de sus personajes eran las manos desproporcionadas, gigantescas, y los símbolos que se repetían en sus obras. Hay obras suyas en la Catedral rosarina, en la Iglesia San Juan Evangelista, bajorrelieves suyos en el Monumento a la Bandera y en la entrada de la Bolsa de Comercio. Y La Plata, San Nicolás y Mar del Plata también cuentan con obras suyas en su patrimionio.

Pero la historia de Barnes (fallecido en 1977) se enlaza con la del Teatro El Círculo. Cuando el número de sus obras, amenazó con superar el espacio disponible en su estudio, Barnes se puso a la tarea de buscar un lugar para guardar sus esculturas. Del trato con los socios del “Círculo”, surgió la posibilidad de que en los sótanos del teatro, las “catacumbas”, Barnes pudiera guardar sus esculturas. El lugar estaba abandonado, lleno de cenizas (provenientes de las calderas con las que se calentaba el teatro); parecía un lugar indicado para alojar sus esculturas de yeso y bronce.

Asegurados de que no se afectara la acústica de la sala, Barnes cubrió el piso de tierra del sótano con lajas provenientes de Hamburgo. Pero no representó un gran costo: esas lajas venían como lastre en los cajones que llegaban al puerto de Rosario y quedaban abandonadas en los muelles rosarinos. Esas lajas siguen allí, en el piso de las catacumbas.

De este modo, la obra de Eduardo Barnes se enlazó con el Teatro El Círculo. A la muerte del artista, los herederos donaron las obras al teatro con la condición de que si, en el futuro, el teatro desaparece, las esculturas de Barnes vuelvan a la comunidad rosarina, su auténtica propietaria. Y en las catacumbas de la sala funciona el excepcional Museo de Arte Sacro Eduardo Barnes que recomendamos visitar a todo aquel que pase por Rosario.

En este álbum en Facebook hemos reunido las fotos que sacamos en nuestra visita al Museo:
http://www.facebook.com/media/set/?set=a.10150215602546421.344669.163209071420&l;=a30ff6f415

pero la imagen apenas puede reflejar la atmósfera de las esculturas alineadas en la semipenumbra de los sótanos lóbregos, con olor a humedad, más de un mosquito (un símbolo rosarino) y los acordes de “Tosca” que se filtraban del ensayo en el escenario sobre nuestras cabezas. Magia inefable vibrando como tensada cuerda del violín rozada por el arco.

Del centenar de obras que componen el patrimonio del Museo, destacamos esta imagen “budista” de la Virgen y el Niño, una obra que estaba en las sombras, apenas visible y al que debimos apelar al flash para conseguir una buena toma de esta particular pieza.

Fin del tríptico post que esperamos sirva de para alimentar la curiosidad de aquel que apunte sus pasos a Rosario. Vale la pena hacerse un lugar en la agenda para visitar el Teatro El Círculo. Al pie, la data donde podrán encontrar los horarios de las visitas guiadas (recomendamos que sea miércoles o viernes, con la posibilidad que coincida con algún ensayo como nos tocó a nosotros) y más información sobre el teatro y Barnes.

FUENTES:
Los dos albúmenes personales en Facebook, con fotos de nuestra visita. La del teatro:
http://www.facebook.com/media/set/?set=a.10150215590466421.344665.163209071420&l;=05d2605bc8
y la del Museo de Arte Sacro Eduardo Barnes:
http://www.facebook.com/media/set/?set=a.10150215602546421.344669.163209071420&l;=a30ff6f415

El artículo en Wikipedia sobre el teatro:
http://www.teatro-elcirculo.com.ar
y sobre Eduardo Barnes:
http://es.wikipedia.org/wiki/Eduardo_Barnes
La página oficial de Barnes de donde tomamos el retrato del artista que hizo Antonio Berni que inicia este post:
http://www.barnespop.com/coleccionbarnes/