Autor: Edna O'BrienEditorial: errata naturaeISBN: 978-84-15217-58-9 Nº de páginas: 304 Irlanda, años 50. Lejos de la capital, Dublín, y en medio de un verde paisaje, bellísimo pero exigente, la joven y aplicada Caithleen ha crecido llena de encanto gracias a la sabiduría y humildad de su madre; una madre obligada, por las duras condiciones del campo, a ser fuerte en cada momento, a sobreponerse a toda desgracia. Pero algo va a suceder que transformará la vida de Caithleen. Y en esa nueva vida, la de la única hija de una familia venida a menos, estará acompañada por su amiga de la infancia Baba, por la sofisticada madre de ésta, por el peculiar Hickey… y por una docena de personajes soberbiamente retratados que hoy día nos siguen pareciendo muy vivos; y entrañables, como en toda vida que merezca la pena rememorar. Cuando tuve en mis manos este libro por primera vez, estaba llena de expectativas. Mucha gente me había hablado de él pero no quise escuchar demasiado las distintas opiniones ni leer las críticas que sobre él se escribían. Tenía la intención de acercarme a él si saber lo menos posible. La historia comienza bien. Siempre me han gustado los libros ambientados en la Inglaterra o la Irlanda rural y éste cumplía este requisito.
También me gusta que las protagonistas sean mujeres, pero que sean fuertes de carácter y a la vez luchadoras y ambiciosas y ahí es cuando empieza a fallar la cosa.
Para más inri, se dice de esta novela que fue un escándalo en su época, y quizá sea cierto, pero visto con los ojos de una lectura del siglo XXI, el escándalo y la novedad yo no la veo por ninguna parte sinceramente.
Vamos al grano.Cait, la protagonista, es una chica joven, huérfana de madre y con un padre alcohólico y ausente pero así y todo no sale adelante como a mi me gustaría. Es una chica sumisa, débil e influenciable. Incluso puedo decir que ha llegado a resultarme insufrible. No he empatizado con ella ni con sus circunstancias.La otra gran protagonista es su amiga Baba, guapa, rica y manipuladora. Maltrata a Cait hasta la saciedad, la insulta, se aprovecha de ella, la engaña y por estos motivos la considero igual de insufrible que a la primera.Ambas me han caído mal desde el principio y cuando eso ocurre la lectura se hace bastante más difícil. El resto de los personajes no le van a la zaga. Os aseguro que lo intenté pero ninguno de ellos me ha caído en gracia. En cuanto a la historia, como ya comenté, comienza bien, resulta interesante y de repente decae. Tanto que las últimas páginas son absolutamente decepcionantes.Cuando cierras el libro piensas: "¿Esto es todo?". Porque tienes la sensación de que a lo largo de 304 páginas no ha pasado nada. Vamos, que hablando en plata te han timado miserablemente.
El final puede entenderse porque por lo visto habrá una segunda y tercera parte de la historia pero así y todo no puedo estar de acuerdo con quienes elogian a este libro y lo consideran una obra maestra.Comparar esta novela con "El hombre tranquilo" me parece hasta osado aunque puede que sea culpa mía y no haya sabido captar toda su esencia. No considero haber malgastado mi dinero porque para mi el dinero que gasto en libros no es dinero tirado pero me pensaré dos veces si continuar leyendo los libros de O'Brien. Espero que mi reseña no os haya disuadido de leer "Las chicas de campo" si verdaderamente os apetece. Como en todo en la vida en la variedad está el gusto y quizá a vosotros os encante y disfrutéis más con él más de lo que yo lo he hecho.