'Las chicas de la 6ª planta': La Roja conquista París

Publicado el 14 junio 2012 por La Mirada De Ulises

[6/10]   Estamos en 1962 y un equipo de mujeres españolas trabaja en el servicio doméstico en un inmueble de París. Viven en la 6ª planta en condiciones no muy dignas, cada una con su pasado de dificultad y sus sueños de felicidad… y de vuelta a casa. En el mismo edificio, Jean-Louis tiene una posición acomodada y un buen trabajo como inversor bursátil, pero se encuentra instalado en la monotonía y aburrimiento de un hogar poco cálido y reconfortante. Su encuentro con esas mujeres vivarachas y auténticas le despertará las ganas de vivir, para trasladarse también a la 6ª planta y sufrir un decisivo cambio en su vida. “Las chicas de la 6ª planta” supone la conquista de París por la Roja, el triunfo de la humanidad sobre la superficialidad, la recuperación del espíritu solidario frente al individualismo… aunque sea a través del tópico y del estereotipo.

En esta comedia costumbrista, Philippe Le Guay nos ofrece todo un repertorio de tópicos y situaciones de mujeres que se vieron obligadas a emigrar para prosperar. Concepción sueña con ganar lo suficiente para construir un piso en su tierra, su sobrina María esconde un triste y duro pasado, mientras que Carmen hace gala de su republicanismo izquierdista tras la tragedia familiar, Dolores reza y suspira por su Galicia del alma y Pilar sufre el maltrato de su marido. No es menor el estereotipo con que se dibuja a la burguesía francesa, con un Jean-Louis cercano a la caricatura de hombre sin vida y marioneta de su mujer Suzanne, o el de ésta como francesa provinciana que esconde su pobreza interior bajo las apariencias de una vida social impostada.

Todo en “Las chicas de la 6ª planta” respira un aire popular y castizo, esquemático hasta el ridículo o tierno hasta lo sensiblero. Y, sin embargo, la película se ve con gusto por su tono agradable, positivo y entrañable. Entretiene desde el tópico, y su desarrollo se hace previsible, aunque el director juegue la baza de algún giro poco verosímil para dar peso a María, auténtico personaje revitalizador de la trama y de la vida de Jean-Louis. Vestuario, ambientación, diseño de producción y música ayudan a crear esa atmósfera de cuento amable, de estampa folclórica de cartón-piedra, alejada del realismo por una mirada complaciente y dulzona. Tienen gracia y salero las interpretaciones de las mujeres españolas, con Carmen Maura como tía protectora y Natalia Verbeke como joven que acapara todo el encanto y dulzura… y la atención de la cámara y de Jean-Louis, mientras que Fabrice Luchini presta su vis cómica a un buen hombre y Sandrine Kiberlain se ve obligada a una interpretación demasiado estereotipada.

Le Guay hace su particular versión de “Criadas y señoras (The help)” desde la división de clases y crítica a la burguesía que el cine francés ha reflejado en innumerables ocasiones. Pero no hay violencia, odio ni revancha, al menos de manera explícita… porque en la trastienda sí que hay abusos y desprecios, chauvinismo e intolerancia, ironía y cierta crítica. Aquí se opta por la buena convivencia y la amabilidad, por el pastel y la paella, con algunos momentos simpáticos y un humor naïf, con una trama que mantiene un ritmo y tono adecuado y que está bien contada desde la sencillez… aunque todo suene a elaboración desde el cliché, incluido los toros y el flamenco. En cualquier caso, la cinta sirve para pasar el rato y para asistir a la conquista de París por la Roja, con un valiente equipo de mujeres españolas que dieron una lección de humanidad y autenticidad.

Calificación: 6/10

 

En las imágenes: Fotogramas de “Las chicas de la 6ª planta”, película distribuida en España por Emon © 2010 Vendôme Production, France 2 Cinéma, SND, CinéCinéma y France Télévision. Todos los derechos reservados.