Las Cinco Canciones de Salva (IV): “¿Qué voy a hacer yo? ” (Celtas Cortos)

Publicado el 05 mayo 2016 por Raúl Rn

Para los que no sepan qué es eso de la "putrefacción sonora", termino acuñado por Salva a partir unas conversaciones locas que mantuvimos hace poco, os recomiendo que os paséis por la entrada que hizo el amigo Alex (que también estaba en el "fregao") hace unos meses en su web Rocktelegram (he dejado enlace en el relato de Salva). En cuanto a Celtas Cortos, yo también tengo muy buenos recuerdos de ellos, de bailes y fiestas de pueblo, hubo una época en la que eran imprescindibles en casi todos los saraos. En esa vena antimilitarista tienen otro tema característico: " Haz Turismo ". Me imagino que, aunque no sea el grupo preferido de Salva, esta canción no se le olvidará nunca, al fin y al cabo aquel día hizo el mejor fichaje de tu vida.

"Esta canción no cambió realmente mi vida. Lo hizo la persona que aflora en mi recuerdo cada vez que la escucho o simplemente rememoro las notas de esta canción. Cuando conocí a mi mujer, Celtas Cortos acababan de publicar su segundo álbum "Gente Impresentable". Ya podías ir a al bar que quisieras, desde el garito más infecto al pub más de moda, allí estaba sonando "¿Qué voy a hacer yo?" (sí, en aquella época esta canción llegó a niveles inverosímiles de putrefación sonora) el canto anti-militarista que los pucelanos pusieron en boca de todo el mundo. Un tema, el antimilitarismo, muy popular en los círculos rockeros, y que aquí se centra en la utilidad de realizar la mili. Por cierto, a mí me dieron por inútil.

Los primeros meses de tonteo amoroso, Celtas Cortos pusieron la banda sonora a la relación con mi mujer, y el de Celtas Cortos fue precisamente el primer concierto al asistimos juntos. Fue en el Festival Actual, el seis de enero de 1991; los de Valladolid eran casi unos desconocidos y, en su primera visita a Logroño, vinieron como teloneros de los irlandeses The Oyster Band, pero los que allí nos concentramos íbamos a escuchar a los Celtas Cortos.

Si soy sincero, del concierto no me enteré demasiado. Entre cerveza y cerveza y con música celta de fondo, Carmen y yo nos pasamos el concierto charlando sobre nuestra vida, esas largas y extensas conversaciones de las primeras citas en las que haces un repaso de lo mejor de tu paso por el mundo para admiración de la persona que enfrente es todo oídos.

Por eso Celtas Cortos siempre ocuparan un lugar muy importante en mis recuerdos. Tal vez el más importante".