Las claves del triunfo de España ante Nigeria fueron:
1. Jordi Alba, un lateral con llegada: hizo su mejor partido con la selección, junto a la final de la Eurocopa 2012, el día que cumplía 20 internacionalidades. Dio un recital físico de inicio a fin del partido. Marcó el segundo gol más rápido de España en una fase final, a los tres minutos. Un lateral que defiende y sorprende en ataque al rival. Se convierte en una baza ofensiva más de la Roja. Un puñal que entra por sorpresa y que guarda la definición de cuando dio sus primeros pasos en el fútbol como delantero.
2. El acierto de Víctor Valdés: la decisión de Vicente del Bosque de dar un partido de grupo a cada portero es algo inédito en la fase final de un gran torneo. No le ha dado mal resultado. Tras jugar Casillas contra Uruguay y Reina ante Tahití, le llegaba el turno a Valdés que dejó paradas de mérito y mucha personalidad en el juego aéreo. Su comportamiento engrandece la competencia por la titularidad de la selección y deja al seleccionador de nuevo en el complicado papel de elegir entré él y el capitán de la Roja para las semifinales ante Italia.
3. El dulce momento de Fernando Torres: los goleadores son los jugadores de campo que más viven de sus rachas. Tienen momentos en los que les entra casi todo lo que tocan y otros en los que por más que lo intentan la suerte les da la espalda. El 'Niño' vive el dulce. En la recta final de la temporada lo demostró en el Chelsea y se ganó la llamada de última hora de Del Bosque. Como en la Eurocopa 2012 cuando acabó siendo máximo goleador del torneo. Ahora, va camino de ello con sus cinco tantos y comienza a declinar la balanza a su favor en el pulso personal con Roberto Soldado. Torres tuvo el gol que le faltó a Soldado, que dejó buenos movimientos pero precipitación en la definición.
4. Seguridad defensiva: pese a que España se hizo larga en el campo, con demasiada distancia entre líneas, lo que complicó la faceta defensiva y generó momentos de llegadas de Nigeria. Los zagueros de la Roja lo solventaron bien y volvieron a dejar su portería a cero. Es una de las claves del éxito. España defiende desde la posesión. Teniendo la pelota sufre menos. Ganó la Eurocopa 2012 encajando un solo tanto en todo el torneo. En la Confederaciones de momento también ha encajado uno, ante Uruguay, en su camino hacia el título que les falta por ganar. Mantener esta firmeza será clave.
5. El calor como factor de riesgo: España sufrió en Fortaleza el día de más calor de un invierno que da sus primeros pasos en Brasil. Jugó a 30 grados y con un alto nivel de humedad. Los titulares estaban descansados, tras no jugar ante Tahití, pero les faltó el aire. Entregaron más de lo que es habitual la pelota al rival, con índices de posesión por momentos igualados con Nigeria. Cuando vieron que sin la pelota el desgaste fue mayor pusieron pausa. La Roja es especialista en tocar y dejar pasar el tiempo. Metieron ritmo cuando desearon y reservaron fuerzas en ciertos momentos sin que se notase en el marcador. En el mismo escenario se jugará la semifinal ante Italia. El bochorno preocupa a la selección.
6. Iniesta al mando: lleva años mostrando su clase por cualquier campo del mundo con la camiseta de España pero la Confederaciones que está firmando Iniesta le convierten en el gran referente. Compilando acciones suyas cuando entra en contacto con el balón se crea un vídeo que debería ponerse en cualquier escuela futbolística. Es puro fútbol. Magia. La muestra de como un jugador puede elegir siempre bien su acción. En el clima contra la Roja que se respira en las gradas de los estadios brasileños, por miedo al que señalan como gran rival, hay un jugador que levanta los aplausos y los sonidos de admiración. Es Iniesta, que ante Nigeria dejó una muestra más de su elegancia y pelea por ser el mejor jugador del torneo con Neymar.
7. Acierto en los cambios: Del Bosque suele tener meditados los cambios, luego algún percance del partido o el resultado modifica su libro de ruta. Le gusta repartir minutos, respetar los galones e intentar tener a sus jugadores satisfechos. Cada uno sabe bien el rol que tiene. La mala noticia de la lesión muscular de Cesc Fábregas adelantó el cambio de David Silva, un titular que ha perdido su espacio con la entrada de un nueve puro en el sistema. Dio resultado porque el canario estuvo acertado en los pases al espacio y su presencia aumentó la posesión. También la entrada en escena de Torres, que marcó en el primer balón que tocó. Por último, Villa aumentó el hambre de más cuando el partido estaba sentenciado e inevitablemente España pensaba en guardar fuerzas para la semifinal del jueves sintiéndose clasificada desde el minuto 3.
8. Una España de récord: la selección dirigida por Del Bosque no pierde un partido oficial desde hace tres años, cuando cayó ante Suiza en el primer partido del Mundial 2010. Desde entonces encadena 28 partidos consecutivos sin perder. Es el premio a la apuesta ciega por un estilo.