El 15 de abril del año pasado, un socialisto de pro (de provecho para él, quería decir), un señor con contrato blindado y jubilación de privilegio a la sazón gobernador del banco más inútil de España y cuyo papel en la función de control de las entidades financieras roza el delito, pidio una reforma del sistema de pensiones que incluía el retraso en la edad de jubilación a los 67 años y el alargamiento del tiempo cotizado para obtener derecho a una prestación.
A las pocas horas, el Ministro de Trabajo, hablando en nombre del gobierno, se mostró “radicalmente en contra de retrasar la edad de jubilación“.Repito: radicalmente en contra…
Esta mañana, el Consejo de Ministros del Gobierno de España, donde participa el Sr. Corbacho, ha aprobado una propuesta de reforma de pensiones que supone el mayor ataque a los derechos de los trabajadores desde hace muchísimos años. Ha propuesto exactamente lo que decía MAFO y negaba Corbacho.
Y son las cuatro y media y todavía, ni siquiera por dignidad, ha considerado dimitir. Es más, de las declaraciones que ha pronunciado hoy mismo tanto la vicepresidenta 1ª, como la perpretadora de esta vergüenza, la Ministra de Hacienda, se deduce que el señor Corbacho apoya hasta los punto y comas del proyecto.
Hoy este gobierno ha abdicado ante la “única política económica posible”, esa que todas las derechas del mundo han logrado imponer en el imaginario. Las del ajuste a los de siempre, las de los recortes para los de siempre, las de los sacrificios de los de siempre. Este gobierno, Y EL PARTIDO QUE LE SUSTENTA, han renunciado a ser de izquierdas definitivamente y lo anuncia a los cuatro vientos. No es que haya girado a la derecha de repente, no. En ella estaban hace tiempo y sólo el marketing de colores nos confundía.
Pues hoy, ya son azules. Sin disimulo.
Vale, Zapatero. El día que reces con San Obama ponle una velita a algún santo electoral, porque de esta no te ampara ni la virgen de la caridad. ¿Conocen ustedes a alguien con más prisa por hacer a Rajoy presidente?.