Las elecciones catalanas piden diálogo y referéndum a gritos

Publicado el 28 septiembre 2015 por Rgalmazan @RGAlmazan

Muchas son las lecturas que se pueden hacer de los resultados de estas elecciones. Al margen de los datos que son objetivos, todas las interpretaciones son interesadas. Basta escuchar a los distintos partidos para darse cuenta.

Junts pel Sí ha ganado rotundamente. Aunque ha obtenido nueve votos menos que la suma de lo que obtuvo en 2012 Ciu + ERC.

Ciutadans ha sido el gran vencedor. Esta marca blanca del PP, que ha pasado de 9 a 26 votos, se ha constituido en el pilar de los que quieren mantener a Cataluña en España sin mover un dedo.

El PSC ha perdido cuatro diputados pero ha conseguido superar los vaticinios que le daban las encuestas. Creo que Iceta y su comportamiento ha sido determinante en este resultado.

Sí Que es Pot ha sufrido un rotundo fracaso. No han conseguido el sorpasso sobre el PSC que era su objetivo y se ha quedado lejos de los datos que le daban las encuestas.

El Partido Popular se ha dado un gran batacazo. Ha perdido ocho escaños. El gran cambio que decían que representaba el racista Albiol se ha diluido.

La CUP ha sido la otra formación triunfadora de estos comicios, ha pasado de 3 a 10 diputados. Lo que permite que sumado a los escaños de Junts, los independentistas hayan obtenido mayoría de asientos en el Parlament.

Unió se ha quedado fuera del parlamento. Duran pone su cargo a disposición del partido.

Pero se pueden sacar más conclusiones de estos resultados. Por ejemplo, los votos de los que representan el independentismo llegan al 48%, por lo tanto quien pretendiera que esto fuera un plebiscito no ha conseguido ganar la batalla.

Sin embargo hay algo, que se ha reflejado poco en los medios de comunicación, muy importante. Los partidarios de que se haga un referéndum en Catalunya (la suma de Sí que es Pot y de Junts pel Sí) han conseguido una amplia mayoría, el 56,7%. ¿Qué hace falta para que se den las condiciones de efectuar una consulta en Catalunya?

Las declaraciones de los peperos, empezando por el pepero mayor del reino, D. Mariano, dejan claro que ellos no se van a mover ni un ápice de su castillo de nacionalismo español cutre y decimonónico. No han entendido nada. La situación es para no perder ni un minuto, hay que llamar a Mas o a quien represente esa opción y ponerse a dialogar, pero ya, cualquier retraso lo que hace es enquistar más el problema, que es lo que parece que buscan los líderes de ambas partes.

No se puede esperar más, aunque me temo que las elecciones generales que están a la vuelta de la esquina, y la inanición del gobierno Rajoy puede aplazar este tema prioritario.

No más mentiras –de ninguna de las partes—, no más agresividad, ni amenazas, hay que jugar esta partida, dialogando y acordando la convocatoria de un referéndum. Todo lo demás es marear la perdiz y llevar esta situación a un callejón sin salida.

Si hay algo claro es que la mayoría de los votos, casi el 57%, están pidiendo una consulta, y aquí no hay excusas, salvo que se quiera imponer la decisión de una minoría (el 43%). Si tanto se habla de democracia, empecemos por respetarla. Si tanto se habla de porcentaje de votos y se quiere obviar la mayoría parlamentaria, el gobierno debería fijarse que una mayoría suficiente pide un referéndum, hacer las reformas legislativas para poder celebrarlo y acordar su convocatoria con la otra parte, sin demora. Todo lo demás, como siempre, es bla, bla, bla. Filfa, sólo filfa.

Salud y República