Nunca podremos generalizar con los embarazos. No existen dos iguales. Incluso en la misma mujer, de un embarazo a otro, encontraremos un gran número de cambios que nos sorprenderán. Pero algo está claro, el cambio que sufrimos en nosotras mismas, es el más grande que vamos a tener en la vida. Ya que influirán cambios físicos y por supuesto, los cambios emocionales, ocasionados por las hormonas. Vamos a analizar cuales son esas sensaciones o emociones más comunes que suelen sentir las mujeres embarazadas.
Las hormonas me vuelven loca.
Nuestro cuerpo es un gran laboratorio químico. En el cual, se producen cada segundos un gran número de reacciones y procesos quimicos. Las hormonas, son las sustancias que hacen posibles muchos de estos procesos. De hecho, un gran número de diferencias entre los hombres y las mujeres, se debe tan solo a las hormonas. Así gran parte de la violencia o la depresión y muchos estados más, se responsabiliza en gran medida a las hormonas que corren por nuestro cuerpo.
En el embarazo, las mujeres tenemos que cambiar de forma radical, algunos de los procesos químicos que se producen en nuestro interior. Ya que tenemos que adaptar el medio a albergar un huesped dentro de nuestro cuerpo. Con lo que una de las primeras cosas que pasan en el embarazo, es un cambio en las hormonas que produce nuestro cuerpo. Esto producirá nuevas reacciones para nosotras. Lo que nos hará que en muchas ocasiones no nos conozcamos a nosotras mismas. Pero tranquila, una vez se acaba el embarazo. El cuerpo tiende a volver a la estabilidad que teniamos antes de quedarnos embarazadas.
Como deciamos, las hormonas, no solo afectarán para que el cuerpo esté preparado para albergar a nuestro niño. Sino que además, cambia la percepción de la vida y nuestro estado de animo. Podemos decir que es fácil que suframos diferentes tipos de emociones. Aunque lo más caracteristico, es el rápido paso de una emoción, a otra totalmente contraria. Seguro que has oido hablar de los cambios bruscos de humor.
¿Cuáles son las emociones más comunes?
Durante el embarazo, tendrás practicamente las mismas emociones que tenias antes de estarlo. Aunque la gran diferencia, es el paso rápido de una a otra, o tener diferentes estados de animo en poco tiempo. Veamos las emociones, con los cambios que puede tener de una a otra.
- Pasar de estar eufórica a la depresión y al revés. Es la que más nos llama la atención. Ya que se nota mucho el cambio. Como en cuestión de minutos, podemos pasar de ser la persona más optimista y más alegre del mundo que lo tiene todo. A sentirnos fatal con nosotras mismas en cosa de unos minutos o si me apuras en algunos casos en segundos. En verdad, éstos cambios, también lo debemos achacar a la importancia que tiene el embarazo para nuestro cerebro. Son sensaciones nuevas, vamos a ser madres, lo que supone la mayor alegría del mundo. Por otro lado, están las dudas, de si seremos buenas como madres, o si lo haremos mal. Esto crea una inestabilidad en nuestra cabeza. Que por suerte al igual que viene, se va en un momento y volvemos a comernos el mundo.
- Los lloros. Es común que nos sintamos muy sensibles. Lo que puede hacer que cualquier cosa nos afecte en mayor modo. No tiene por que ser un llanto de algo negativo. También puede ser de emoción por la situación. Si vemos escenas en películas en las que hay algo emotivo entre una madre y su hijo, no nos afectará como lo hacía antes.
- La temida ansiedad. El estrés de la situación, la incertidumbre y sobre todo la inseguridad durante el embarazo. A ser la mejor madre. Puede que nos de situaciones en las que notemos un crecimiento de nuestra ansiedad. Lo mejor para evitarla, es no exigirnos mucho. Seguro que vas a ser una madre genial. También otro responsable de ello, es el miedo a lo desconocido o al cambio.
- Se me olvida todo. Durante los 9 meses de embarazo, siempre tendrás en mente tu estado de forma incosciente. Además empiezas a pensar en tu bebé. Lo que hace que aunque sin querer, ocupes más parte de tus pensamientos, en cosas que antes no lo hacias. Esto provoca que nos despistemos con otras cosas que en ese momento han pasado a un segundo plano.