Las empresas saludables actúan antes de que ocurra el exceso de trabajo

Publicado el 16 julio 2018 por Masservice

Trabajar duro es algo positivo para la empresa y también para el empleado; para la empresa, porque gana en competitividad y para el trabajador, porque se siente bien consigo mismo y se motiva para seguir alcanzando sus metas profesionales.

Sin embargo, la presión constante y el exceso de trabajo continuado merma la efectividad a largo plazo. Los trabajadores sometidos a cargas superiores a las que pueden soportar enferman más y rinden menos.

En ocasiones, son los directivos de las empresas quienes fomentan este modelo de trabajo. En otros casos, son los propios empleados quienes, por su personalidad, son incapaces de desconectar y alargan su jornada laboral muy por encima de lo recomendable.

EQUILIBRIO ENTRE PRODUCTIVIDAD Y SALUD

En estos casos, lo ideal es que entre empresas y trabajadores se analize la situación para encontrar un punto de equilibrio entre la productividad deseable y el exceso inabarcable.

Las últimas investigaciones sobre las empresas saludables revelan que los empleados que trabajan entre 60 y 80 horas semanales de manera habitual tienen mayor riesgo de disfunciones neurológicas y de otros trastornos, como diabetes tipo 2, depresión, ansiedad, problemas musculoesqueléticos y enfermedades cardiovasculares.

Uno de los factores que incide en esta situación es la falta de recuperación laboral, es decir, el tiempo utilizado por las personas para realizar actividades no relacionadas con el trabajo. Muchos profesionales se sienten incapaces de desconectar al final de su jornada laboral, por lo que entran en una dinámica que les lleva a la fatiga crónica y el agotamiento.

Las organizaciones deberían apostar por un modelo de empresa saludable formando a sus directivos en la importancia del sueño y el descanso. La productividad debe ser entendida como un beneficio sostenido en el tiempo más que como largas temporadas de picos altos de trabajo con plazos de entrega muy ajustados que acaban por mermar la salud.

UNA NUEVA CULTURA DE SALUD EN LA EMPRESA

El nuevo modelo de empresa saludable se puede abordar desde diferentes ángulos en función del perfil de la compañía y de los trabajadores. En cualquier caso, todas las acciones encaminadas a la promoción de la salud en el trabajo mejoran el bienestar de los empleados y redundan en una mayor productividad.

Los cuatro pilares en los que se apoya el alto rendimiento son la energía física, emocional, mental y espiritual. Si alguno de estos factores se descompensa, el engranaje deja de funcionar.

Las empresas concienciadas con la promoción de la salud en el trabajo lo sabe bien y toman medidas para proporcionar a sus trabajadores espacios para la desconexión. Existen muchas soluciones para evitar los efectos perjudiciales del exceso de trabajo.

En Masservice entendemos que la salud en el trabajo debe abarcar cuerpo, mente y espíritu. Por ello, ofrecemos alternativas variadas para cada empresa:

  • Servicio de fruta fresca en la oficina para fomentar los hábitos alimenticios sanos
  • Servicio de fisioterapia en la oficina para corregir posturas y aliviar molestias musculoesqueléticas
  • Gestión psicosocial, que incluye diferentes actividades y talleres, como yoga en la empresa para ayudar a los trabajadores a conectar consigo mismos o mindfulness en la empresa para trabajar la productividad y la concentración.

En definitiva, se trata de fomentar el ejercicio, la dieta saludable y la práctica de la meditación para contrarrestar los efectos nocivos del exceso de trabajo. Invertir en salud en la empresa es el punto fuerte de las organizaciones actuales para evitar bajas por enfermedad y ser más competitivas a largo plazo.

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