Pensándolo bien, ese debería ser el próximo libro que escriba porque ahora hay una moda de ponerle flores a la comida y, según he leído, hay flores comestibles que pueden sustituir la carne y los alimentos tradicionales.
Las flores comestibles se pueden combinar de tal forma que su sabor sea compatible con los platos que hacemos. Las flores tienen características que hacen de ella un alimento nutritivo ya que aporta proteínas y derivados de vitamina A y, lo más importante, son bajas en calorías.
La verdad que no me veo comiendo, digamos, arroz con geranio o carne a la tulipán, pero para el gusto se hicieron los sabores.
He aquí una lista de flores comestibles tomada de la revista Vida Sana:
Jamaica: se usa principalmente para hacer agua de sabor pero mezclada con frutas sabe deliciosa. Tiene efecto desinflamatorio y diurético.
Cempasúchil: se usa para ser pan o se mezcla la parte blanco en el arroz para darle un toque gourmet.
Violetas: se usa en ensaladas mezcladas con sabores salados como el queso y pescado para darle un toque suave.
Flor de Calabaza: usada en quesadilla o en sopas
Rosas: usadas en postres
Flor de Yuca: estas flores blancas son dulces y crujientes lo que hacen una deliciosa mezcla con la ensalada
Menta: Para bebidas y postres. A mí me encanta en el té y el mojito
Geranios, y Primaveras: usadas en la ensalada >br/>
Gladiolas: tiene un sabor casi indescriptible, como la lechuga pero más dulce. Se usa en ensaladas
Tulipán: en ensaladas y para rellenarlos de atún o papa
La revista también aconseja que si se va a introducir flores en la dieta, hacerlo poco a poco, no vayamos a hacer una metura de flores que nos provoque una diarrea. Y obviamente, si eres alérgica a las plantas, es probable que algunas de estas flores causen molestias. Para su elección, tomar la que estén bien abiertas.