Recuerdo ver de pequeña, en la biblioteca de mi casa, un librito que poderosamente me llamaba siempre la atención. Leía y releía su título y lo que contenía cientos de veces. Sobre su portada aparecía el título orgulloso de sí mismo: “Refranero español”.
Debió nacer entonces mi afición por los refranes, los dichos y las frases inspiradoras. De hecho, uno de mis tablones favoritos en Pinterest “Quotes” está basado en frases que me inspiran, me hacen sonreír, o me motivan. Sí, lo reconozco, soy una de esas personas que coleccionan palabras. Música para el corazón. Supongo que hay cosas peores.
Hace no mucho descubrí una de esas sentencias que me motivan, que me ayudan a continuar siempre que me siento un poco cansada o falta de ganas para llevar a cabo una tarea como es debido (léase: “Puf! ¡Qué pereza! No me apetece nada sacar el trípode”, o bien “¿Y ahora voy a ponerme a planchar esa pequeña arruga del mantel? Si después en la foto no se verá tanto…” , o aquella tan socorrida de “Ya lo arreglaré con Photoshop”).
Atención a la siguiente frase, es real como la vida misma. No la perdáis de vista…
Más frases geniales sobre fotografía y otras cosas en el tablón…