Cuando hablamos de la FM Towns Marty lo hacemos de la primera y gran derrotada consola de 32 bits. Lanzada por la japonesa Fujitsu en 1993 y comercializada únicamente en Japón, a imagen y semejanza del ordenador FM Towns, vendió sólo unas 45.000 unidades y dejó de fabricarse tras unos 2 años, en 1995. En general, estamos ante uno de los mayores fiascos de la historia de las videoconsolas.
Especificaciones técnicas
Como veníamos diciendo, nos encontramos con la primera consola con un procesador de 32 bits a 16 Mhz (por ejemplo, tanto la PlaySation como la Saturn salieron a finales de 1994), lo cual representó el saltó a la quinta generación de videoconsolas en un momento en que todavía se encontraban plenamente en boga las de 16 bits como la SNES y Mega Drive, quizás con alguna excepción como la Amiga CD32 o la 3DO, que salieron unos meses después.
En cuanto a memoria RAM, contaba con 2 MB, igual que PlaySation, 3DO o Amiga CD32, los cuales quedaban muy atrás si los comparamos con consolas un poco posteriores como la Saturn que tenía 16 MB (si bien es cierto que hay muchos que consideraron la Saturn como una consola de 64 bits, ya que tenía dos procesadores de 32 bits).
En cuanto al apartado gráfico contaba con una resolución de entre 352×232 y 640×480, con una paleta de 32768 colores y una RAM de vídeo de 640 KB, que no dejaba de ser algo exigua, especialmente si tenemos como referencia consolas como la Saturn con 12 MB de vídeo, los 2 MB de la Panasonic 3DO o el 1MB de la PlayStation.
En el aspecto de audio, ofrecía un sonido 16 bits y 6 canales, algo por detrás de las consolas que hemos referenciado anteriormente.
Aspecto exterior
El aspecto exterior de la consola es bastante sobrio y en cierto modo, aburrido, De color blanco, en la parte superior izquierda se abre el compartimento para el CD-ROM, dejando el lateral derecho la ranura para los discos de 3½ que también utilizaba. En este sentido, se configura como algo realmente novedoso, al estar ante una consola con doble sistema de lectura, todo ello en claro guiño a la compatibilidad con el ordenador de la misma casa. Por lo demás, el frontal guarda espacio para los puertos de los mandos (dos), un teclado y la salida para audio y video.
El controlador es de corte clásico, en forma de media luna y con sólo dos botones de acción frontales (más dos de menú en la parte inferior) y otro botón de acción en la esquina superior derecha.
Recepción y vida
Como no pasará desapercibido a nadie, esta consola tuvo unas ventas realmente bajas, considerándose uno de los mayores desastres comerciales del mundo de las videoconsolas, al no pasar de unas 45.000 unidades vendidas.
El problema nunca estuvo en el hardware, que era de lo mejor que había en el mercado cuando salió. Realmente la problemática radicó desde el principio en el elevado precio de la consola, que rozaba casi los 700 dólares, muy superior al de otros sistemas coetáneos. Asimismo, se desarrollaron muy pocos juegos para esta plataforma y, aunque en principio los títulos del ordenador FM Towns eran compatibles con la Marty, siempre existieron muchos problemas reales de compatibilidad.
En definitiva, la consola nunca despegó y, aunque se lanzó una segunda versión que vendió algo mejor, Fujitsu decidió cancelar el proyecto en 1995.
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