Las hijas de la tierra - Alaitz Leceaga

Publicado el 16 octubre 2019 por Entremislibrosyo

Poco más de un año ha transcurrido desde que finalizaba la reseña de El bosque sabe tu nombre, novela debut de Alaitz Leceaga, comentando que estaba segura de que la autora nos iba a deparar muchas alegrías literarias y la primera de ellas no se ha hecho esperar porque el pasado mes de septiembre se publicó su segunda novela y ya solo el título y la portada me enamoraron. Hoy os hablo de Las hijas de la tierra.

Mi opinión


Corre 1889 y los viñedos de la finca Las Urracas, en La Rioja, continúan secas desde hace años, según se cuenta por la maldición que recae sobre las Veltrán-Belasco, tres hermanas huérfanas de madre, Gloria, Teresa y Verónica, de las que se dice llevan el demonio dentro y cuya vida transcurre solitaria y apartada en una mansión que amenaza ruina y con la única compañía de su padre, su hermano y una tía.
Gloria, la mayor de las tres, será la voz encargada de conducirnos por esta saga familiar con ciertos tintes góticos que no solo ha cubierto mis expectativas, sino que las ha superado y de qué forma. Es difícil decantarse por cuál es el aspecto más relevante en Las hijas de la tierra porque Alaitz Leceaga ha escrito una novela redonda se mire por donde se mire. Empezando por la trama en sí misma, bien planteada y mejor desarrollada con un ritmo cadencioso que invita a una lectura pausada con la que recrearse en la magnífica prosa de la autora con un estilo elegante y envolvente con el consigue situar al lector en el epicentro de la historia, viviendo y respirando como lo hacen sus personajes.
Porque toca ya hablar de esos personajes que habitan las páginas de Las hijas de la tierra, empezando por esas tres mujeres perfectamente definidas y que brillan con luz propia junto a los numerosos secundarios para los que Alaitz Leceaga se toma también el tiempo necesario para perfilarlos, consiguiendo con ello un elenco que traspasa el papel impreso para sentirlos como personas reales a las que amar o detestar. Los que me conocéis sabéis que los personajes femeninos fuertes me fascinan y sin duda esto es lo que nos ofrece la autora que, como ya hiciera en El bosque sabe tunombre, nos presenta a unas mujeres que no se conforman con el papel al que la sociedad las ha relegado y que luchan contra las adversidades a pesar de los tropiezos que salpican el camino.
Si a una buena trama y a unos personajes potentes le sumamos una magnífica ambientación, ya tenemos todos los ingredientes para convertir una novela en una lectura inolvidable. La autora nos traslada no solo a los paisajes y resto de escenarios descritos, sino a la vida y al ambiente de una sociedad en la que la mujer solo servía para parir y atender la casa y los hijos, sin poder alzar la voz para decir lo que piensa y lo que siente. Pero ni Gloria, ni sus dos hermanas, han nacido para callar y agachar la cabeza y contra viento y marea lucharán por aquello en lo que creen a lo largo de una novela que toca temas tan diversos como el ansia de poder, la venganza, los celos, el maltrato, la homosexualidad… Y todo ello aderezado con un pequeño toque sobrenatural tratado de forma exquisita de modo que quien quiera creer en fantasmas, creerá, y los más escépticos siempre encontrarán la explicación racional.
Creo que queda claro lo muchísimo que me ha gustado Las hijas de la tierra, una de mis mejores lecturas de este año. Una novela inolvidable con unos personajes rotundos y narrada con una prosa impecablecon la que Alaitz Leceaga se convierte desde ya en una de mis autoras de referencia. No lo dudéis y leedla.

Ficha técnica