El pasado uno de marzo, por fin salía a la venta ‘Las horas distantes’, la nueva y esperada novela de Kate Morton. La autora de ‘La casa de Riverton’ y ‘El jardín olvidado’ ha vuelto a las librerías con más fuerza que nunca, con una novela inmensa pero magistralmente construida. Desde aquí reitero, una vez más, mi agradecimiento a Suma de Letras por la deferencia y el envío del ejemplar para hacer la reseña.
‘Las horas distantes’ nos traslada de nuevo a la Inglaterra de la Primera Guerra Mundial. Esta historia comienza cuando Edie Burchill está disfrutando de una agradable comida de domingo con su madre Meredith. Esa misma tarde, de una manera muy extraña, llega una carta dirigida a Meredith. Algo cambia en el semblante de la mujer y Edie se da cuenta de ello…
Pero, para empezar a contar esta historia, hay que presentar correctamente a Edie. La joven trabaja como editora en un pequeño sello local. Además, recientemente se ha separado y no está pasando por su mejor momento personal. No quiere que su familia se entere y por eso, intenta guardar el secreto, hasta que la situación económicamente es insostenible y tiene que volver a casa de sus padres.
Ahora bien, contar la historia de Edie también es contar la de Meredith. En 1939 Merry, que es así como la llaman, fue una de las niñas evacuadas como consecuencia de la Gran Guerra. Para evitar el hambre y las bombas que caen en Londres, Merry se sube a un tren con destino Milderhurst Castle, un precioso complejo en Kent. Este, es un lugar especial, es la gran mansión de Rymond Blythe, el autor de ‘El hombre de barro’, un libro que será el eje fundamental para el desarrollo de esta historia. Así conocemos a Percy, Saffy y Juniper, las hermanas Blythe, las hijas del escritor y las personas que acogieron en Milderhurst a la niña Meredith. Ellas, enseñaron a la pequeña el amor por las letras y, sobre todo, por la verdadera historia de ‘El hombre de barro’. De una manera casi casual Edie se entera de que su madre estuvo en régimen de acogida en la casa de su escritor favorito, del autor que sin quererlo, ha marcado su vida.
Así pues, decide investigar sobre la vida de su madre, una mujer a la que realmente desconoce. A través de la retrospección y gracias a las cartas que su tía Rita le deja, Edie va desenmarañando una historia difícil y de extrañas características. Es por estas miradas al pasado por las que conocemos el proteccionismo de Percy, la mayor de las hermanas Blythe, hacia Saffy y, sobre todo, a la débil Juniper. ¿Qué pasó para que a Juniper se le fuera la cabeza?, ¿qué ocurrió realmente con su prometido?, ¿por qué nunca volvió?
Poco a poco, Edie va recomponiendo un puzzle de mil piezas. La extraña leyenda de los Blythe cobra fuerza cada vez descubre algo nuevo del rompecabezas… ¿Qué esconden las horas distantes entre los muros de Milderhurst?
Kate Morton vuele a “hacer diana” con ‘Las horas distantes’. A través de los muros de este castillo, la autora sumerge al lector en un cuento para adultos, del que no podremos despegarnos hasta llegar a la última página. La familia Blythe formará parte de ese elemento mágico de leyenda que toda historia misteriosa debe tener. Percy, Saffy y Juniper son tres protagonistas indiscutibles que dotan a la narración de ese halo misterioso, en un entorno que ha sido tocado, cruelmente, por la desgracia.
Volvemos a encontrarnos con una autora que es un genio a la hora de describir personajes e inventarse unas vidas increíbles de las que, irremediablemente, necesitamos saber más. Morton sabe transmitir y plasmar las vivencias de unos protagonistas siempre especiales, siempre necesarios. Así, el lector se enfrena a unos personajes cargados de recuerdos, de pasado y de vergüenzas. Por otra parte, Edie y su madre Meredith, también se hacen piezas necesarias en una narración que en ningún momento pierde el ritmo. Son indispensables porque es la segunda pata sobre la que se sustenta esta maravillosa historia. Meredith fue testigo directo de lo que ocurrió en Milderhurst Castle con la familia Blythe. Por su parte, a través de las cartas que escribió y recibió de Juniper, Edie va descubriendo quién fue su madre y por qué ha querido ocultar siempre un pasado que, bajo su punto de vista, fue maravilloso.
Así, Kate Morton crea cinco mujeres inolvidables, con sus miedos, sus secretos y una vida que el lector tendrá que ir descubriendo poco a poco. En esta novela, la autora vuelve a hacer gala de su particular estilo narrativo. Sin grandes florituras en el aspecto técnico y sintáctico, Morton acerca una historia de nuevo contada en dos tiempos y con dos voces narrativas totalmente diferentes. Desde 1939 a 1993, el lector se tendrá que adentrar en dos historias que, en realidad, forman parte de un conjunto enigmático, soberbio y excepcional. Edie es quién cuenta en primera persona la historia que está descubriendo y lo hace de una manera muy particular, dirigiéndose al lector continuamente, con un estilo muy cercano y lleno de guiños y complicidad mientras es testigo de lo que ocurrió en la mansión de los Blythe entre 1939 y 1941.
En dos tiempos van pasando ‘Las horas distantes’, un título muy acertado y que se va entendiendo cuando la novela avanza. Desde Percy hasta Edie. Poco a poco vamos indagando en la historia de estas mujeres que tanto tienen que ver entre sí, que tantas historias tienen que contar, que contarnos.
Kate Morton se consagra con esta nueva novela no sólo como una escritora de moda, también como una de las autoras que más darán que hablar en el siglo XXI. Sus tres obras destilan sencillez y un intenso brillo que será difícil de olvidar. Son razones suficientes para esperar con ganas y optimismo sus próximas publicaciones. 10/10.