La razón es que, de no ser así, pueden estar intentando desarrollar proyectos que quizá ni siquiera sean viables.
De entrada, gran parte de la superficie de la Sierra de San Miguelito no es urbanizable, por lo que el cambio de uso de suelo deberá ser o no autorizado de acuerdo con los estudios técnicos que se efectuarán; será necesario delimitar con precisión cuáles áreas habrán de preservarse debido a su importancia ecológica, así como también, ubicar las fallas geológicas, las zonas inundables y de absorción.
Rodríguez Álvarez remarcó que los resultados de los estudios técnicos quedarán registrados en un programa de planeación urbana y que la Dirección de Catastro y Desarrollo Urbano tomará las decisiones sobre el uso de suelo de acuerdo con lo que en él se establezca.
Por otro lado, Fernando Torre Silva, director del Instituto Municipal de Planeación (Implan), añadió que pese a las decisiones del comisariado, es al municipio a quien le corresponde determinar los usos de suelo.