Las Lindas, de Melisa Liebenthal

Publicado el 25 abril 2016 por María Bertoni

Cobertura de Espectadores.

Si Simone de Beauvoir siguiera viva y le prestara atención a la movida cultural porteña, seguro habría celebrado el premio que el jurado del 18º BAFICI le otorgó a la directora de Las Lindas. Es que el ejercicio autobiográfico de Melisa Liebenthal ilustra con inteligencia, sensibilidad, honestidad, sentido del humor la teoría de la ensayista francesa sobre la condición femenina en tanto construcción social y cultural.

Liebenthal encontró la materia prima de su trabajo en fotos y videos hogareños que ella y sus amigas de la infancia tomaron y grabaron en tiempos de niñez y adolescencia. Alrededor de estos testimonios, giran la voz en off de la directora y las conversaciones que mantuvo y filmó con esas mismas chicas, a esta altura veinteañeras. El pasado reciente recupera actualidad, e invita a reflexionar sobre el proceso que De Beauvoir definió con la célebre frase “No se nace mujer; llega uno a serlo”.

Por este film, Melisa Liebenthal fue elegida “mejor directora” de la competencia argentina del 18º BAFICI.

El maquillaje, la vestimenta, la sonrisa, el cabello largo, el tono de voz, la depilación, la relación con el sexo opuesto son algunos de los mandatos que la realizadora analiza como si practicara una vivisección, en este caso del estereotipo de la femineidad en el siglo XXI. Aunque rara vez abandona el uso de la primera persona (en singular y en plural), se las ingenia para evitar el riesgo que corren los autores de ejercicios similares: quedar atrapados en el pantano autorreferencial.