Las malas compañías del PSOE

Publicado el 09 septiembre 2015 por Juantorreslopez @juantorreslopez

Publicado en Público.es el 8 de septiembre de 2015

Resulta muy difícil sorprenderse por algo en la política española actual pero saber quién es uno de los últimos compañeros de viaje del PSOE de Pedro Sánchez rompe una nueva frontera.

Me refiero a que, con motivo del fichaje de Piketty por Podemos, el PSOE ha informado, según he podido leer en la prensa, que también trabaja con Larry Summers para preparar su programa económico.

Ya sabíamos a quién había encargado Pedro Sánchez que prepare sus propuestas económicas: Angel Ubide y Jordi Sevilla, dos personas muy inteligentes y magníficos profesionales pero ambos empleados al servicio de grandes empresas y grupos financieros. Sorprendió que el nuevo secretario general del PSOE renunciara a dar un barniz más claramente socialista a su programa pero incluso de ahí a lo del antiguo colaborador de Clinton y ejecutivo del Banco Mundial hay un largo trecho.

Summers es un machista que tuvo que dimitir como presidente de la Universidad de Harvard por las críticas que recibió después de afirmar públicamente que las diferencias entre la posición que mujeres y hombres ocupan en la ciencia se debe a condiciones innatas y no a circunstancias sociales o culturales (más información aquí).

Pero no solo es un machista.

Como Secretario del Tesoro estadounidense derogó la famosa ley Glass-Steagall que separaba a la banca comercial de la de inversión, una medida que permitió que se dieran gran parte de los problemas financieros que provocaron la crisis de 2007. Y, por si eso fuera poco, vetó en varias ocasiones (por cierto a iniciativa de una mujer, Brooksley Born) que el Congreso regulase el mercado de derivados, las “armas de destrucción masiva” (en palabras del financiero Warren Buffett) que terminaron dinamitando a la economía mundial en estos últimos años. El documental Inside Job da cuenta detallada del papel de Summers como desencadenante de todo lo que ha ocurrido (más información aquí). El propio Clinton reconoció con el tiempo que Summers le había asesorado inadecuadamente.

Y no paran ahí las fechorías que ha cometido Summers a lo largo de su carrera como economista al directo servicio de los más poderosos sin importarle las consecuencias de sus actos ni sus efectos sobre los seres humanos.

En diciembre 1991 firmó un memorándum interno en su condición de Economista en jefe del Banco Mundial en el que recomendaba que los residuos tóxicos producidos en los países ricos se desviaran a los países pobres por tres razones:
  1. Los costes de la contaminación dependen de los ingresos que se pierden por ella y si el país es pobre los que se pierde por ella es menos. Textualmente decía: “Creo que la lógica económica detrás del vertido de una carga de basura tóxica en el país de menor salario es impecable, y debemos hacernos cargo de eso”.
  2. Los países pobres tienen demasiada poca contaminación: “Siempre he pensado que los países menos poblados de África están en gran medida sub-contaminados, la calidad del aire probablemente es extremadamente e ineficientemente baja en comparación con Los Angeles o México DF”.
  3. En los países en donde hay menos esperanza de vida la preocupación por factores que puedan ponerla en peligro con el tiempo es menor (Más información y el texto completo del memorándum aquí).

Summer, además, ha dado muestras de que actúa como un cínico para ocultar los verdaderos problemas que genera la industria financiera de la que vive o que es un ignorante. En una conferencia con banqueros centrales que se celebró en 2005, el entonces economista en jefe del Fondo Monetario Internacional, Raghuram Rajan, hizo una exposición muy brillante en la que advertía de los riesgos de una gran crisis inminente. Summers tomó la palabra cuando acabó, lo atacó duramente llamándolo ludita antimercado, despreciando sus preocupaciones y diciéndole que el control que proponía para evitar la crisis solo conseguiría reducir la productividad del sector financiero.

Este es el gran economista que trabaja con el PSOE de Pedro Sánchez.

Tengo la completa convicción de que en España es muy necesario que haya un partido socialista fuerte y en condiciones de sacar adelante medidas que mejoren el bienestar de los grupos sociales más desfavorecidos. Pero ¿qué políticas de igualdad se pueden esperar de un partido que se asesora de machistas como Summers? ¿qué tipo de políticas económicas puede llevar a cabo quien está en nómina de los grupos económicos y financieros más poderosos de España y el mundo? ¿qué freno a las crisis pueden poner quienes en lugar de controlar a los grandes capitales les dan todo tipo de facilidades? ¿qué avance social y qué consuelo a las clases populares puede traer quien no tiene corazón y desprecia la vida de los más pobres? ¿Y qué éxito político puede tener un partido que se asesora por alguien tan tonto que piensa que el planeta en su conjunto no se verá afectado si se contamina en su sito en lugar de en otro?

Espero que los miles de socialistas españoles honestos tomen nota de todo esto y no se dejen llevar por quienes en realidad son los causantes de los problemas que tenemos.