Las mayores rebeliones de esclavos de la historia

Por Viriato @ZProvincia
Desde Espartaco en Roma a la independencia de Haití, estos fueron los momentos más violentos en los que los esclavos lucharon por su libertad.

La esclavitud ha sido una práctica permitida hasta el siglo XIX. Es decir, durante prácticamente toda la historia de la humanidad han existido esclavos. Y, claro está, la búsqueda de la libertad ha sido una constante por parte de aquellos que vivían sometidos, más aún para quienes el maltrato formaba parte del día a día. Es por ello que a lo largo de la historia no han faltado revueltas de esclavos. Repasamos aquí algunas de las más destacadas.

La rebelión de Espartaco

Espartaco fue un gladiador que lideró la rebelión de esclavos con más éxito de la historia de la antigua Roma. De hecho, se enmarca dentro de un proceso más largo en el que se dieron tres revueltas de esclavos durante la etapa de la República romana conocido como las guerras serviles (135-71 a. C.). Aunque hoy día muchos perciban a Espartaco como un héroe que luchó contra el sistema opresivo de esclavitud romana, esta es una imagen más propia del cine o de interpretaciones más actuales. Podemos afirmar que el origen de la famosa rebelión de Espartaco fue más mundano: el gladiador simplemente pretendía escaparse para ser libre, pero al ser descubierto solo tuvo la opción de luchar para evitar ser ejecutado. Claro que este inicio no impide reconocer los logros que obtuvo Espartaco en su intentona.
“En el año 73 a.C., Espartaco y algunos otros conspiradores idearon un plan para escapar del recinto y dirigirse hacia el norte más allá de los Apeninos para encontrar su libertad. Este plan incluía alrededor de otros 200 esclavos y, con tantos involucrados, no es sorprendente que la información se filtrara a las autoridades. Espartaco sabía que serían torturados antes de que los mataran y, por lo tanto, dirigió a 78 de sus compañeros esclavos a una rebelión. Hicieron una incursión en la cocina y se armaron con cuchillos y espetones y luego asesinaron a sus instructores y captores. Una vez libres, encontraron más armas en los almacenes y un carro de transporte y después huyeron de la escuela hacia el campo cercano donde acamparon en algún lugar de las pendientes del monte Vesubio. Allí eligieron como líderes a Espartaco, a Enomao y a Crixo”.

Pero, como la mayoría de las rebeliones de esclavos de la historia, no tiene un final feliz. Aunque Espartaco y los suyos lograron derrotar a ejércitos enviados por Roma, la respuesta no tardó en ser más contundente y nombraron comandante a Marco Licinio Craso, cuyas fuerzas militares derrotaron a Espartaco.

Rebelión Zanj

Alí ibn Mohammed lideró una revuelta de esclavos contra el califato abasí entre los años 869 y 883. Se originó en el sur de la actual Irak y la protagonizaron esclavos del imperio islámico que habían sido capturados en la costa de África Oriental, aunque durante el proceso se sumaron a la rebelión hombres libres y esclavos de otras procedencias.

Las condiciones de vida de estos zanj eran muy miserables. Según las fuentes que han tratado el tema, se estima que llegaron a participar más de 500 000 esclavos. Es por ello que el califato desplegó una potente fuerza militar para sofocar la rebelión y, tras varios enfrentamientos, lograron capturar y ejecutar a varios de los líderes rebeldes. En el año 883 lograron acabar con Mohammed y acabar con la revuelta.

Revolución de Haití

En 1791 tuvo lugar la única revolución de esclavos con éxito de la historia. Después de un duro y sangriento proceso, en 1804 se proclamó la independencia de Haití, que hasta entonces había sido territorio colonial y esclavista de Francia en el Caribe. Supuso la primera república negra del mundo y marcó un punto de inflexión para el inicio del fin de la esclavitud en el mundo.
A finales del siglo XVIII, Francia utilizaba mano esclava con más de 500 000 africanos dedicados a la producción de algodón, añil, café y azúcar. La esperanza de vida en aquellas plantaciones rondaba los 10 años en cuanto ponías un pie en la isla como esclavo. Sin embargo, las ideas de la revolución francesa también cruzaron el Atlántico y François Dominique Toussaint encabezó un ejército de esclavos dispuesto a luchar por su libertad.

Lograron derrotar las fuerzas que los colonos blancos enviaron como represión y se sucedieron los éxitos. Francia abolió la esclavitud en 1794 y en 1804 se declaró la independencia de la colonia, que recuperó el nombre de que los nativos tenían para la isla antes de la llegada de los españoles: Haití.

Insurrección de Southampton

También conocida como la rebelión esclava de Nat Turner, tuvo lugar en el condado estadounidense de Southampton en agosto de 1831. Recibe su nombre por el líder del movimiento, Nat Turner, un esclavo cuya actuación fue el caso de resistencia más importante contra el sistema esclavista de Estados Unidos antes de la guerra de Secesión.
Turner aprendió a leer y desarrolló un profundo sentimiento religioso por el que decía recibir mensajes de Dios y por ello llegó a conocer por el resto de los esclavos como El Profeta. En febrero de 1831 presenció un eclipse y lo interpretó como un mensaje para revelarse contra los amos esclavistas. Lejos de los números mencionados en las demás rebeliones de este artículo, en este caso se llevó a cabo a manos de unos cincuenta hombres, que fueron internándose plantación por plantación para liberar a los esclavos y matar a los blancos.

Sin embargo, el intento no duró más de dos días, pues los esclavistas lograron sofocar la revuelta y poner en huida a Turner a quien capturaron dos meses después en un pantano. El 5 de noviembre de 1831 fue condenado a muerte y lo ahorcaron una semana más tarde. Aún faltaban 35 años para que Estados Unidos aboliera la esclavitud.