Las mejores frases de Eduardo Galeano

Publicado el 13 abril 2015 por Alba Chaparro @Alba_Chaparro

13 de abril de 2015. Fallece Eduardo Galeano. Fallece una de las figuras más importantes de la literatura combativa, de la denuncia social, de quien reparte estocadas de verdad con la aguerrida pluma de la conciencia. Descanse en paz, don Eduardo. El mundo, sin usted, se ha convertido en algo un poquito más feo.

- La realidad imita a la tele.

- Para no ser mudos, hay que empezar por no ser sordos. - El desarrollo desarrolla la desigualdad.

- La división internacional del trabajo consiste en que unos países se especializan en ganar y otros en perder.

- El poder es como un violín. Se toma con la izquierda y se toca con la derecha.

- Estamos en plena cultura del envase. El contrato de matrimonio importa más que el amor, el funeral más que el muerto, la ropa más que el cuerpo y la misa más que Dio s.

- "Mercado": lugar donde se fija el precio de la gente y otras mercancías.

- La cultura de consumo, cultura del desvínculo, nos adiestra para creer que las cosas ocurren porque sí.

- La utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Entonces, ¿para qué sirve la utopía? Para eso, sirve para caminar. - Ahora las torturas se llaman "apremios ilegales". La traición se llama "realismo". El oportunismo se llama "pragmatismo". El imperialismo se llama "globalización". Y a las víctimas del imperialismo se las llama "países en vías de desarrollo".

- Los delincuentes pobres son los villanos de la película; los delincuentes ricos escriben el guion y dirigen a los actores.

- Los niños pobres son los que más sufren la contradicción entre una cultura que manda a consumir y una realidad que lo prohíbe.

- El sistema capitalista se come todo lo que encuentra. Incluye una ideología, una moral, una concepción de la vida y de las cosas que es peligrosa para el género humano y para el planeta que habitamos. Es bueno, bajo ese sistema, todo lo que es rentable, y todo lo que no es rentable no merece existir. Eso conduce a la rifa del planeta. De hecho, las dos actividades más lucrativas en el mundo de hoy son actividades enemigas de la condición humana: el comercio de drogas y el comercio de armas. Las armas son parte esencial de la industria militar, que es en realidad una industria criminal.

- Yo escribo para quienes no pueden leerme. Los de abajo, los que esperan desde hace siglos en la cola de la historia, no saben leer o no tienen con qué.

- A diferencia de la solidaridad, que es horizontal y se ejerce de igual a igual, la caridad se practica de arriba abajo, humilla a quien la recibe y jamás altera ni un poquito las relaciones de poder.

- En el mercado libre, es natural la victoria del fuerte y legítima la aniquilación del débil. Así se eleva el racismo a la categoría de doctrina económica.

- El torturador es un funcionario. El dictador es un funcionario. Burócratas armados que pierden su empleo si no cumplen con eficiencia su tarea. Eso, y nada más que eso. No son monstruos extraordinarios. No vamos a regalarles esa grandeza.

- La violencia engendra violencia, como se sabe; pero también engendra ganancias para la industria de la violencia, que la vende como espectáculo y la convierte en objeto de consumo.

- La industria norteamericana de armamentos practica la lucha contra el terrorismo vendiendo armas a gobiernos terroristas, cuya única relación con los derechos humanos consiste en que hacen todo lo posible por aniquilarlos.

- La historia de América Latina es la historia del despojo de sus recursos naturales. - El código moral del fin del milenio no condena la injusticia, sino el fracaso.

- Quien no está preso de la necesidad, está preso del miedo: unos no duermen por la ansiedad de tener las cosas que no tienen, y otros no duermen por el pánico de perder las cosas que tienen.

- Como Dios, el capitalismo tiene la mejor opinión sobre sí mismo, y no duda de su propia eternidad.

- Yo creo que fuimos nacidos hijos de los días, porque cada día tiene una historia y nosotros somos las historias que vivimos. - El mundo es una gran paradoja que gira en el universo. A este paso, de aquí a poco los propietarios del planeta prohibirán el hambre y la sed, para que no falten el pan ni el agua. - Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos.

- Con el dinero ocurre al revés que con las personas: cuanto más libre, peor.

- Para justificarse, el terrorismo de Estado fabrica terroristas: siembra odio y cosecha coartadas.

- No consigo dormir. Tengo una mujer atravesada entre los párpados. Si pudiera, le diría que se vaya; pero tengo una mujer atravesada en la garganta.