Desde que empezamos a jugar con las consolas de 128 bits hemos visto que se repite la misma historia, la consola que en papel es la menos potente de las que se reparten el mercado, es la que más venta consigue de videojuegos y de máquinas colocándose en un primer puesto. Se puede ver en consolas como la Playstation 2 que barrió del mapa a Game Cube y Xbox en la sexta generación de consolas y luego en la siguiente generación dónde la Wii de Nintendo arrasó en ventas a Xbox360 y Playatation 3.
Las condiciones para que eso ocurra son muy claras, pero parece ser que los fabricantes en la guerra por ser la consola más vendida obvian 3 cosas de peso que los harían triunfadores. Son las siguientes:
1 – Precio de la consola más económico: Así es más fácil llegar a más público. 2 – Gran cantidad de títulos: A más títulos, más diversidad. Aunque suelen salir a la venta verdaderas patatas, también en parte proporcional salen grandes títulos. Por ejemplo hay más juegos geniales en Playstation 2 que sumando todo el catálogo de Xbox. 3 – Facilidad de desarrollo: Si quieres títulos de gran calidad y que los hagan como churros, tienes que tener un sistema muy asequible al programador.
Nintendo ya ha movido ficha con su Nintendo Wii U, ¿qué haran Sony y Microsoft con sus nuevas consolas?