Las mujeres, un pilar fundamental en cualquier lucha social

Publicado el 26 octubre 2017 por Msnoferini

Un buen amigo, que es miembro de la PAH, me decía una vez como ante un problema de la gravedad del habitacional suelen ser mayoría las mujeres las que se mueven para acudir a las asambleas a explicar su problema y buscar soluciones. Según él los hombres solemos ser más “huevones” y mientras buena parte se queda en casa lamentándose o sentados delante del televisor han de ser las leonas las que luchen y se preocupen de buscar soluciones a los problemas familiares.

Lo cierto es que no sé cuál es el grado de huevones que hay entre la población masculina pero las experiencias que he tenido siempre me han demostrado que en cualquier lucha tener a mujeres al frente es toda una garantía, y la lucha contra la explotación en el sector cárnico y sus falsas cooperativas no es una excepción.

Sin menospreciar la labor de los trabajadores de la industria cárnica, muchos de los cuales llevan tiempo batallando y se han jugado reiteradamente su puesto de trabajo luchando contra la explotación y buscando mejorar las condiciones laborales de todo el conjunto de la plantilla  -con los que desde Càrnies en Lluita tenemos el placer de poder trabajar codo con codo-,  pero sin la labor y el empuje que han demostrado algunas mujeres en esta lucha no creo que el resultado hubiera sido el mismo. Un ejemplo de ello lo tenemos en nuestra compañera, de Càrnies en Lluita, Montse Castañé, sin la cual dudo mucho que se hubieran conseguido los logros obtenidos en el matadero donde trabaja y que la han acabado convirtiendo en un referente y ejemplo de lucha y constancia. Y siguiendo la estela dejada por Montse en estos últimos tiempos he podido ser testigo de la lucha de otra mujer, que a mi entender va camino de convertirse en otro modelo a seguir en la dura lucha de los trabajadoras/es del sector cárnico, y esa sería la compañera de Càrnies, Mariela Salazar, trabajadora del matadero Le Porc Gourmet. Mujeres, las dos, luchadoras y sin pelos en la lengua capaces de convertirse en un referente en sus empresas y en el sector cárnico de la comarca de Osona.

Desde este pequeño escrito me gustaría deciros: gracias compañeras, es un orgullo compartir tiempo y esfuerzos con vosotras, y que vuestra implicación es un ejemplo a seguir.

MSNoferini