Reconozco que algo que me fascina, y cada vez más, son las fotografías antiguas. Esos fragmentos de vida que fueron capturados hace, en ocasiones, más de un siglo y que ahora, en la era del wifi y del wassapp recuperamos con una facilidad pasmosa. Escalas de grises que nos permiten teletransportarnos a otra época, un viaje en el que tratamos de compartir preocupaciones e inquietudes con gente de otro siglo.
En mi particular búsqueda de fotografías viejas de Madrid me he topado con muchas instantáneas de la Plaza Mayor. Una plaza, en ocasiones irreconocible, que ha presentado variados y diferentes aspectos a lo largo de su intensa vida. Originalmente era una laguna fangosa pero ya en el Siglo XVI se empieza a celebrar en este lugar un mercado y se le comienza a llamar “Plaza del Arrabal”.
Desde entonces las funciones que ha desempeñado han sido muy variadas, desde Autos de Fe y ejecuciones de la Inquisición, hasta corridas de toros o mercadillos. Actualmente su principal función es ser uno de los grandes centros turísticos de Madrid. Un espacio que podréis disfrutar de primera mano gracias a algunos de los apartamentos para vacaciones que Housetrip dispone en la ciudad.
Su fisionomía a lo largo de estos casi cinco siglos de historia ha ido evolucionando con el tiempo. Después de sufrir tres graves incendios y ser escenario de distintos acontecimientos históricos, ahora, es un espacio ideado para el disfrute y la contemplación. Un lugar encantador del cual os quiero mostrar su faceta más camaleónica. (Si queréis ver la imagen ampliada pinchad sobre ella)
En estos dos primeros dibujos, del Siglo XVII, vemos la celebración de unos Autos de Fe en una Plaza Mayor que no estaba cerrada por completo y cubierta por unas lonas.
Aquí ya vemos la Plaza Mayor en el Siglo XIX, con una importante novedad, la presencia de un pequeño parque en el centro, un jardín a la francesa, y con tranvías que la atravesaban. (La línea hacía el recorrido Plaza Mayor – Carabancheles – Leganés).
En estas fotos, anteriores a la Guerra Civil, vemos aspectos de la vida cotidiana de la Plaza Mayor.
La siguiente fotografía es durante la Guerra Civil, con el monumento a Felipe III tapado para protegerlo de los impactos enemigos. (Sorprende el gran número de personas que hay en la calle…)
Tras el conflicto bélico la plaza comienza a recuperar su normalidad, fotos de la década de los cincuenta en los que vemos que ya han quitado la arboleda central. (En la segunda fotografía parece que estén celebrando algún tipo de mercadillo)
En 1968 la plaza se prepara para su último gran lavado de cara. Aquí durante las obras para construir un parking subterráneo detrás de las cuales se colocó el adoquinado actual.
Y luego viene ya la Plaza Mayor como la conocemos actualmente, después de ver cómo estuvo en el pasado, da la sensación de que ahora está demasiado vacía, ¿no?
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El día que Chamberí tembló