Este artículo -modificado- fue expuesto originalmente con diapositivas en el Centro de Estudios Públicos de la ciudad de Santiago, Chile, invita a la audiencia a imaginar que se está asistiendo a los Juegos Olímpicos de la antigüedad.
Trataré de imaginar, con los elementos suministrados en aquel evento, día tras la dia, la realidad de los Juegos Olímpicos en la Antigua Grecia.
Lo que me propongo hacer en estas páginas es explorar sumariamente las olimpíadas antiguas como fenómeno histórico y social, despojándolas de la pátina romántica con que se las cubrió durante el siglo XIX y comienzos del XX, e ilustrándolas a partir del arte producido por los griegos mismos.
Al alba, en el bouleuterion o sede del Consejo, se tomará juramento a los competidores y a los jueces ante el altar de Zeus Horkios, Zeus de los Juramentos. Luego se iniciarán las competencias para heraldos y trompetis-tas, seguidas de carreras, lucha y boxeo para jóvenes de 12 a 18 años.
Habrá también oraciones públicas y privadas al igual que sacrificios en el Altis o recinto sagrado. Se consultará los oráculos.
Por la tarde habrá algún discurso de un sofista o filósofo de nota y recitales de poesía y de historia. Muchos de los presentes aprovecharán la ocasión para visitar el Altis y reunirse con viejos amigos de otras ciudades.
El gran altar de Zeus según Adler y Curtius.Segundo día
Por la mañana las actividades se iniciarán con una procesión solemne en el hipódromo, seguida de las carreras de carros y de caballos.
La tarde estará dedicada al pentatlón: disco, jabalina, salto largo, carrera y lucha libre11. Al caer el sol se celebrarán ritos funerarios en honor de Pelops, el héroe ancestral del santuario, con una procesión de vencedores elogiados con himnos o epinicios. Comidas y simposios por la noche.
Segundo día.Las actividades se inician temprano con una procesión de los Hellanodikai, los embajadores oficiales de las póleis y de todos los competidores alrededor del gran altar que se encuentra delante del templo de Zeus. Se ofrecen diversos sacrificios de animales, que culminan con la hecatombe o sacrificio público de cien bueyes ofrecido por los anfitriones, los ciudadanos de Elis.
Las carreras tienen lugar hoy. La más corta es el estadio (192 metros), seguida por el díaulos, el doble de la anterior, una carrera en la cual los atletas corren hasta el extremo opuesto del estadio, giran alrededor de un poste de madera o kamptér y vuelven a la línea de partida o bálbis. Hay también una carrera de larga distancia o dólijos de más o menos 5 kilómetros. El día lo cierra un banquete público en la sede de los magistrados de Elis.
Las tres primeras de estas pruebas sólo existen como parte del pentatlón.Carrera corta o "estadio" ilustrada en un ánfora que se otorgaba como premio en las panate-neas, por el Pintor de Berlín, 480/470 a. C. Berlín, Antikenmuseum.
Tercer día.Hoy es el día de las pruebas de combate. Por la mañana lucha libre, por la tarde boxeo y pancracio, un tipo de lucha violenta en que se permiten las llaves y los golpes. Sólo está prohibido sacarle los ojos al contrincante.
El día concluye con el hoplitodrómos o carrera con armadura de soldado de infantería pesada ( hoplites).
Cuarto día.Procesión de los vencedores hasta el templo de Zeus, donde los Hellanodikai les premian con coronas de olivo silvestre y los presentes les lanzan una lluvia de hojas y flores ( fillobolía). Celebraciones y grandes fiestas de despedida.
Quinto día.Al día siguiente todos inician el lento regreso a sus respectivas póleis, donde los atletas vencedores recibirán más honores, premios en dinero y especies, culminando a veces con la asignación de comidas gratis por el resto de sus días y con la erección de una estatua pagada por el erario público. Habrá un frenesí colectivo y muchos de los ciudadanos estarán orgullosos por el triunfo de un pariente o del hijo de un vecino o simplemente de un atleta ligado a ellos por amistad cívica.