La CMT reduce de cinco días a uno el plazo que tienen las operadoras para migrar las líneas de teléfono.
A partir de ahora, los operadores tienen diez días para presentar las alegaciones que estimen oportunas, pero aún no se conoce a partir de a qué fecha se hará efectiva la nueva normativa, que contempla que las portabilidades se realicen también de madrugada para ocasionar las menores molestias posibles a los clientes.
A pesar de la imposición del nuevo plazo, los clientes podrán solicitar que la operación se realice más tarde con el objeto de negociar con su operadora condiciones de renovación del contrato.
Los nuevos operadores móviles denunciaron que, a lo largo del año pasado, perdieron unas 50.000 líneas por las prácticas de retención que llevan a cabo las grandes operadoras, que pueden renegociar tarifas o facilitar nuevos terminales a los clientes insatisfechos.
Fuente: SiliconNews