OJO. CONTIENE SPOILERS DE LOS EPISODIOS THE WALKING DEAD 3X01/3X02.
UN REGRESO A LA TIERRA DE LOS MUERTOS LLENO DE FURIA Y DESESPERACIÓN.
Mira chico, aparta esa pistola. Las balas no me detienen, las navajas no me hieren… Mira…¡Mírame! Soy el error del piloto, soy la malformación del feto, soy el cromosoma aleatorio… soy la más completa y total locura… soy el miedo”. El Cuervo de James O’Barr.
El pasado 14 de octubre de 2012 se estrenó la tercera temporada de la magnífica serie The Walking Dead y un día después se emitió en España por el canal Fox. Las expectativas que los seguidores de la serie teníamos eran muy altas ante su regreso y podemos afirmar que los dos primeros episodios de la tercera temporada son de una gran calidad.
El comienzo de la tercera temporada es un oscuro viaje a la desolación y al ansia de supervivencia del ser humano. Su magnífico prólogo antes de los títulos del primer episodio sitúa a los personajes en una huida desesperada de esas criaturas del infierno que conocemos como zombis o muertos vivientes. Un primer plano del ojo de un zombi da inicio a este prólogo, cuando la cámara se va retirando de su horrible rostro vemos que el resucitado se encuentra dentro de una casa donde de pronto entran a refugiarse Rick Grimes (Andrew Lincoln) y los otros supervivientes. Todos actúan con una coordinación letal incluso vemos como el joven Carl Grimes (Chandler Riggs) demuestra mucha más dureza a la hora de enfrentarse a una zombi, a la que mata de un disparo.
Pronto han de abandonar la casa y la huida continúa hasta llegar a una cárcel que ha quedado abandonada a merced de los muertos vivientes. A partir de aquí se produce una lucha entre los supervivientes y los zombis ya que los primeros quieren entrar en un terreno vallado de la cárcel y más tarde en la cárcel misma a instancias de Rick Grimes que los convence para así tener un lugar aún más seguro en el que refugiarse. Una angustiosa lucha a sangre y fuego que se desarrolla con los supervivientes luchando y matando zombis para ir ganando terreno hasta conseguir su objetivo. Dentro de la cárcel descubren a unos presos que han sobrevivido pero las relaciones entre ellos y el grupo de Rick Grimes, como hemos visto en el segundo episodio, terminan de forma violenta y trágica.
REFUGIARSE CUANDO TE PERSIGUEN LOS MUERTOS VIVIENTES.
Yo soy SOMBRA, y mi morada está al lado de las catacumbas de Ptolemáis, y cerca de las oscuras planicies de Clíseo, que bordean el impuro canal de Caronte”. Sombra de Edgar Allan Poe.
Rick Grimes (Andrew Lincoln)
El grupo de supervivientes de The Walking Dead busca en la seguridad de la cárcel poder tener un refugio de los muertos vivientes y algo de tranquilidad si es que se puede tener alguna en la Tierra de los Muertos. En el clásico La noche de los muertos vivientes (1968) de George A. Romero el protagonista Ben (Duane Jones) se refugia junto a otras personas en una casa rodeados de muertos vivientes al acecho de sus posibles víctimas siendo cuestión de tiempo que tan perversas criaturas logren entrar en la casa mientras la desesperación se adueña de los supervivientes que solo pueden resistir hasta ser arrastrados más tarde o más temprano por la oscura marea de los zombis. Al final, los muertos logran entrar y el horror se desata en la casa aunque irónicamente Ben es abatido por un grupo de cazadores de muertos vivientes que lo confunden con un resucitado. También en otra gran película de zombis Amanecer de los muertos (2004) de Zack Snyder la protagonista Ana Clark (Sarah Polley) se refugia junto a otras personas en un centro comercial herméticamente cerrado y que está rodeado por los zombis. El centro comercial es como una fortaleza que los protege de los ejércitos de la oscuridad pero por culpa de uno de los personajes los zombis logran entrar y es por ello que deben huir en unos autobuses preparados en un viaje alucinante por las calles llenas de resucitados. Da igual que estemos en una pequeña casa que en un gran centro comercial cerrado, el caso es que los zombis siempre encuentran una forma de entrar y de atraparnos con sus pútridas manos.
Los personajes de The Walking Dead se encuentran dentro de la cárcel aunque nunca podemos saber hasta que punto se encuentran seguros y libres de los muertos vivientes. Es un edificio con lúgubres pasillos y tétricos pabellones que crean una atmósfera realmente angustiosa y que parece el marco perfecto para una historia como la que nos cuenta la serie. No hay lugares seguros en este mundo de tinieblas, recordemos la granja de la segunda temporada. Nos parecía un lugar hasta cierto punto seguro pero para nuestra sorpresa Hershel Greene (Scott Wilson) tenía a un grupo de zombis encerrados dentro del granero pensando que podría haber una curación para ellos y finalmente llegó todo un ejército de muertos vivientes que atacó la granja ¿Hay lugar para los vivos en la Tierra de los Muertos? No hay una respuesta segura a esta pregunta.
The Walking Dead nos ha vuelto a introducir en su mundo de horror, furia y desesperación. El horror de lo que es la supervivencia en el mundo de los zombis, la furia de la lucha para poder seguir viviendo día tras día y la desesperación por saber que ellos siempre están ahí, esperando el momento de que seamos parte de su macabro festín.