Género. Narrativa Fantástica.
Lo que nos cuenta. Brendan Doyle, experto en narrativa inglesa decimonónica, es contratado por un millonario que ha encontrado huecos en el espacio-tiempo para que acompañe a un grupo en un viaje en el tiempo hasta el siglo XIX con la intención de escuchar una conferencia de Samuel Taylor Coleridge. Pero Brendan queda atrapado en el pasado por la acción de unos ocultistas que tratan de traer de vuelta el poder de los dioses del Antiguo Egipto y usarlo como arma contra el Imperio Británico.
Mi opinión. Novela que mezcla lo histórico y lo fantástico en una localización de época bastante lograda, que ofrece esos vaivenes marca del autor que, tras momentos de tensión narrativa y eventos muy bien contados, ofrece otros igual de exitosos en lo técnico pero faltos de nervio e incluso, en ocasiones, innecesarios para el devenir de la historia que cuenta, de buen ritmo que se vuelve alocado en ocasiones, que deja muchas cosas del trasfondo en el aire (otra seña de identidad de Powers), llena de personajes que por momentos suponen un cruce de géneros o de subgéneros más bien, que necesita atención del lector porque si bien no es compleja sí se narra de una forma algo retorcida (una tercera característica del escritor), irregular y atractiva llamativa a su manera, curiosa para todos y que genera sensaciones encontradas.
Destacado. El uso de la canción Yesterday. Es una bobada pero funciona y no se olvida.
Potenciales Evocados. Dickens y Wells, Edgar Rice Burroughs y Dickens, Stephen King y Dickens, Dickens y Crichton, Isaac Bashevis Singer y Dickens… ¿Me explico?