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Las reservas de crudo subieron en EEUU la semana pasada contra todos los pronósticos y alcanzaron un nuevo récord en 31 años, según los datos semanales del departamento de Energía (DoE) publicados este jueves.
Las reservas de crudo subieron tres millones de barriles durante la semana que terminó el 24 de mayo, cuando los expertos interrogados por la agencia Dow Jones Newswires esperaban un retroceso de 400.000 barriles.
Se ubicaron así en 397,6 millones de barriles (mb), un nuevo máximo desde el comienzo de la publicación de estas estadísticas en 1982.
Estas reservas bajaron casi un millón de barriles durante la dos semanas anteriores, después de haber llegado a su anterior récord desde 1982 a inicios de mayo.
Según las cifras mensuales del departamento de Energía, también es un récord desde 1931.
Las reservas de productos destilados aumentaron 1,9 mb, a 120,7 mb, casi diez veces más de lo previsto por los analistas, que esperaban un alza de 200.000 barriles.
Las reservas de gasolina, muy seguidas por los operadores al llegar la temporada estival de grandes viajes en coche, retrocedieron 1,5 mb, también muy por encima de lo previsto por los expertos, que habían estimado una caída de 200.000 barriles.
Hacia las 15H15 GMT, el barril de ‘light sweet crude’ (WTI) para entrega en julio limitaba sus pérdidas a 45 centavos, a 92,68 dólares, en el New York Mercantile Exchange (Nymex).