Opinión personal:Siendo sincera, cuando supe de la publicación de este libro, al principio no me llamaba mucho la atención; fue poco a poco, reseña tras reseña (principalmente la de Ligeia, que caló hondo en mí), como me decidí por fin a hacerme con este libro y descubrir la historia que se encerraba en sus páginas. A día de hoy, tras haberlo leído y releído, porque una vez no fue suficiente, debo decir que ha sido una de mis mejores decisiones y este libro ha pasado a formar parte de una de mis mejores lecturas.
Creo que esta va a ser una de esas reseñas difíciles de hacer, porque me resulta muy complicado hablaros de este libro, que tanto, tanto, tanto me ha gustado, sin estar a cada párrafo recomendándoos su lectura. Y porque es una historia que no se me puede resumir, que no se puede contar, sino que se tiene que descubrir.
Standish Treadwell es el protagonista de esta breve pero intensa historia. Un niño con una mentalidad que muchos otros quisieran, que te roba el corazón desde los primeros ocho renglones que forman el primer capítulo de la historia. Es un alma pura e inocente, pero que se percata de la realidad en la que vive en todo momento. Es diferente, original.
Por un lado están los que piensan linealmente, y por otro lado estás tú, que eres como un golpe de brisa en el parque de la imaginación.
Aunque no es solo Standish el mejor personaje que he conocido, porque también está su abuelo Harry, su amigo Hector, los Lush -padres de Hector-, y la señorita Phillips. Pero es que hasta los villanos, los malos malísimos, forman parte de esta increíble y desgarradora historia, y están perfectamente bien definidos y desarrollados. Todos los personajes son redondos, perfectos, inigualables.
No voy a contaros nada sobre la historia de este libro, porque quiero que vosotros mismos lo descubráis; pero si voy a deciros que Patria, donde está ambientada esta historia, es un lugar frío, triste y deprimente. Mucho más de lo que ya se puede intuir a través de la sinopsis del libro.
Yo estaba sentado junto a la ventana, pero ya no soñaba despierto. Había demasiada realidad alrededor, el exceso cerraba la puerta a las fantasías.
Son varios temas los que se tocan en la historia, todos ellos muy importantes, pero quiero destacar la amistad, por que la frase anterior me ha calado hondo, cada vez que la leo me deja sin palabras y me pone los pelos de punta, porque todo lo que dice es cierto, está cargada de miles de sentimientos, es desnudar al corazón con sinceridad.
Cuando te fuiste, sentí un vacío enorme. No podía ir por ahí con semejante vacío en el corazón. Este mundo sin sentido solo tiene sentido gracias a ti. Tú me diste botas espaciales para que pudiera caminar por otros planetas. Sin ti, me siento perdido. No sé si tirar a la derecha o a la izquierda. No veo el mañana, solo kilómetros y kilómetros de ayeres. Ahora que te he encontrado, ya no me importa lo que ocurra. Por eso he venido hasta aquí. Por ti. Porque te quiero. Porque eres mi mejor amigo. Mi hermano.
La narración de Gardner es pura maravilla. Te llega al corazón de una manera impresionante, y consigue calar hondo en lo más profundo del mismo, con unas frases que te roban el aliento, te dejan sin sentido y que son tan ciertas como la vida misma. Su estilo es sencillo, hermoso y claro; cada una de sus frases está cargada de una sinceridad brutal, por eso este libro, esta historia, es imposible de olvidar.
Las tres caras de la luna es una historia extraordinaria, conmovedora, desgarradora y sincera, que llega a lo más profundo del corazón del lector. Un clásico del siglo XXI. Una lectura obligatoria. Un libro inolvidable.
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