Las verdaderas negociaciones son con Francia, dice hijo de Gaddafi

Por Jorge Luis Rodríguez González
ARGEL, julio 11.— Seif al Islam Gaddafi, segundo hijo de Muammar al-Gaddafi y portavoz oficial del régimen libio, afirmó que Trípoli lleva a cabo las verdaderas negociaciones sobre el conflicto en Libia con Francia y no con los opositores armados, en entrevista publicada este lunes por el diario argelino El Jabar.
En el diálogo, que según el rotativo argelino tuvo lugar el viernes pasado, el hijo del líder libio asegura que Libia recibió por intermedio de un enviado especial que se reunió con Nicolas Sarkozy, un mensaje claro de París: «el presidente francés dijo muy francamente a nuestro emisario: “fuimos nosotros quienes creamos ese consejo (Consejo Nacional de Transición) y sin el apoyo de Francia, el dinero y las armas, éste no existiría”».
«Los franceses nos informaron oficialmente que querían instaurar un gobierno de transición en Libia. Sarkozy dijo a un emisario libio: “yo tengo una lista y estos son los hombres de Francia”», afirmó Seif al Islam.
El hijo del líder libio recordó que el régimen había comenzado contactos con representantes de los rebeldes en El Cairo, pero Francia los bloqueó porque, según él, habían arrancado sin su conocimiento.
En respuesta, Francia negó tener negociaciones directas con Trípoli, aunque admitió que enviaba mensajes al régimen de Gaddafi.
«Dichos mensajes son simples y sin ambigüedades: toda solución política pasa por la salida de Gaddafi del poder y su renuncia a todo papel político», dijo el portavoz del ministerio francés de Relaciones Exteriores, Bernard Valero.
Sin embargo, el ministro galo de Defensa, Gerard Longuet, dejó entender que Gaddafi podría quedarse en Trípoli, después de un cese de las hostilidades y del comienzo del diálogo, al decir que el líder libio «estará en otra habitación de su palacio con otro título», en caso de que no se haya ido de la nación árabe para ese momento.
En tanto, se supo que desde su comienzo la guerra en Libia le ha costado a Francia 160 millones de euros, una cantidad que según afirmó el ex ministro francés de Defensa Hervé Morin, no es excesiva.
Sin embargo, la cifra irrita a los sindicatos y algunos sectores políticos, cuando predomina un desempleo creciente y la carestía de la vida se hace cada vez mayor.
Las declaraciones de Morin se producen un día antes de que la Asamblea Nacional francesa debata y vote sobre la intervención gala en Libia para autorizar o no su prolongación, más allá de los cuatro meses previstos por la Constitución.
Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo a su homólogo ruso Dmitriv Medvedev, durante una conferencia telefónica, que su país estaba dispuesto a apoyar las negociaciones que lleven a una tarnsición democrática en Libia si Muammar al-Gaddafi abandona el poder.
Rusia intenta jugar un papel de mediador en el conflicto libio y ha expresado su desacuerdo con la mala interpretación hecha por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, al excederla con sus bombardeos para derrotar el régimen de Gaddafi.
Moscú no hizo uso de su derecho de veto pero se abstuvo en febrero en el Consejo de Seguridad con respecto a esta resolución, que autorizó la aplicación de todas las medidas necesarias para «proteger civiles», lo cual le ha servido a la Alianza para agredir a la nación árabe.
La guerra contra Libia podría ser tocado el miércoles de esta semana durante una visita del ministro ruso de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, a la Casa Blanca, la cual Obama aguarda con expectativa, según la presidencia estadounidense.