Da igual las que pruebe, ninguna me gusta como la de mi madre...es de esos platos que cuando los pruebas lo que te vienen a la cabeza es: "Está bueno... pero la de mi madre está mucho mejor" ( jejeje sabeis a lo que me refiero).
Como muchas recetas, está la versión larga y la versión corta. La larga consistiría en cocer la pasta a la manera tradicional, preparar la bechamel y el tomate frito caseros, pero yo voy a transcribir la de ella que es con bechamel y el tomate comprados, y con la pasta para canelones precocida. Lo bueno es que es una receta bastante rápida de hacer, que con un par de niños revoltosos... igual resultaba más fácil.
INGREDIENTES
- Un paquete de pasta para canelones (precocidos de Gallo quedan perfectos)
- 1/2 kg de carne picada
- Un bote de bechamel (a nosotras nos gusta el de la marca President)
- 1 cebolla
- Pan rallado
- Tomate frito
- Queso rallado
En una sartén con un poco de aceite pochamos la cebolla cortada finita. Cuando esté bien pochadita se añade la carne y se fríe. Una vez frita añadimos el tomate frito, lo bastante para toda la carne pero que no quede con demasiado caldo. Como el tomate suelta aceitillo, si nos queda con demasiado podemos usar el truco de mi madre: añadir pan rallado, incorporándolo a la carne, así empapará el aceite y queda menos pringosa. Y como cada cocinero tiene sus trucos, es el momento del mio: yo en este momento de la receta le pongo un buen puñado de queso rallado, y lo muevo hasta que se funde con la carne...mi madre opina que así la lasaña engorda mucho pero mami: "es lasaña! no es light precisamente..." jejejeje
Seguimos con la receta, en la bandeja que vayamos a usar ponemos un poco de bechamel y, con ayuda de una cuchara, la repartimos por toda la base. Momento de la pasta, como las uso precocidas las suelo poner en agua caliente (calentada al microondas) 30 minutos antes del momento de usarlas (instrucciones del fabricante), más o menos cuando empiezo con lo de la carne que he explicado antes. Una vez pasado este tiempo, sacamos las láminas del agua y las secamos en un paño limpio.
Colocamos láminas encima de la bechamel de la bandeja, cubriendo toda la superficie de esta, cubrimos con una capa de carne. Repetimos la operacion tres veces. Sobre la última capa de carne cubrimos bien con bechamel. De esta manera la lasaña queda asi:
(ABAJO) Bechamel - Pasta - Carne - Pasta- Carne- Pasta - Carne - Bechamel (ARRIBA)
Solo quedaría poner queso rallado por encima, la cantidad segun os guste (yo soy muy quesera y cuanto más mejor), y la metemos al horno o al grill para que se funda el queso y se quede doradita por encima.
Si os preguntais por que uso pasta para canelones y no para lasaña os responderé fácil, por comodidad! me resulta más fácil encajarlas en la bandeja porque son cuadradras, mientras que las de lasaña son rectangulares. Pero no hay mayor diferencia y podeis usar las que prefirais.
No es una receta con mucho misterio, pero os puedo asegurar que la lasaña de mi madre es mítica, mi marido y algún que otro amigo mío están siempre al loro cuando la cocina, a ver si les cae un trozo... jejejejejeSaludos, y que la disfruteis!!