Lasaña individual de verduras

Por Carolina La Cuchara De Mis Recetas @lacucharademisr

A veces, muchas veces, el poco tiempo y las prisas del día a día nos hacen olvidarnos un poco de la necesidad de una dieta equilibrada, de comer un mínimo de verduras y frutas diariamente y ¡claro! de hacer algo de ejercicio. Es la base para mantenerse sano o al menos la creencia de que lo estamos haciendo  bien.

En verano, la fruta entra casi sola, los niños hasta la piden, es refrescante, poco calórica y sobre todo llena de sabor. Pero ¿qué pasa con las verduras?… pues que siempre entran al segundo plano y no debe de así. Asociamos verdura a dieta, lo verde a poco sabroso.  Y no es así. Combinaciones infinitas harán que las verduras sean platos de tu devoción y que además, favorezcan a los dichosos kilos de más que todos tenemos en mente.

Seguro que tienes un montón de recetas que por pereza no haces, ésta es mi particular lasaña verde... y tan verde es que hasta las láminas de pasta son de espinacas… y el relleno: unas espinacas frescas, unas barritas de surimi, unas gambitas y unas cucharas de queso para untar (light, si gustas) para darle un gusto cremoso al relleno. ¿Qué te parece si te paso la receta?

Ingredientes (Para dos lasañas verdes individuales)

  • 8 placas de pasta de espinacas
  • 300 gramos de espinacas frescas
  • 150 gramos de gambas
  • 10 palitos de cangrejo o surimi
  • 1 tarrina de queso crema, puede ser light
  • 1/2 cebollita finamente picada
  • 1 chorreón de leche
  • Sal

Pon a hervir las placas de lasaña en agua hirviendo.

Mientras tanto, en una sartén, pon un chorreón de aceite de oliva y ve friendo las espinacas. Como ya sabrás, parecen muchas pero se quedan en nada. Cuando ya estén, resérvalas en un bol. Cuando se enfríen un poquito, córtalas sobre una tabla de madera.

Fríe la cebolla muy picada y cuando esté pochada, añade los palitos de cangrejo cortados a dados y las gambas. Cuando ya estén hechos, añade las espinacas, mezclando bien. Una vez mezclados, añade dos cucharas grandes del queso y dale vueltas. Añade un poco de sal. Así ya tienes el relleno de la lasaña.

Una vez que estén cocidas las placas y enfriadas sobre un trapo de cocina, puedes recortarla con forma de círculo con un molde como yo he hecho, o dejarlas rectangulares o cuadradas, ¡imaginación al poder!

Ahora ya nada más, hay que montar la lasaña sobre papel de encerar, una capa de pasta, una cuchara de relleno y así al gusto del consumidor, entre 3 y 4 capas está muy bien para un comensal. También puedes hacer esta receta montándola en una bandeja y cortar porciones.

Para gratinar, pon a calentar un chorreón abundante de leche y echa el resto de queso sobrante del paquete para que se mezclen. Cuando tengas listas las lasañitas, rocíalo a modo de bechamel y mete a gratinar por unos 15-20 minutos.

¡Qué lo disfrutes!

¡Te espero la semana que viene!