Comprenderán los lectores que me indigne. En un Ayuntamiento en el que el uso de las nuevas tecnologías es una excepción, en un Ayuntamiento en el que el grado de innovación depende de la voluntad personal de cada funcionario, en un Ayuntamiento en el que no hay ningún responsable de impulsar el uso de nuevas tecnologías (algunas tan "modernas" como el scaner de documentos), van y se gastan el dinero en una inversión cuya dudosa utilidad se limita a los días previos al 5 de enero.
Considero que hubiera sido bastante más útil e importante diseñar esa App para poder interactuar con la administración local sin necesidad de trámites o desplazamientos inútiles. Los Ayuntamientos de cientos de ciudades españolas están preparados para la e-administración, para que sus ciudadanos puedan llevar a cabo trámites "on line", mientras que en Ibi ni siquiera se hace público el e-mail de los Concejales.
Hace años que vengo denunciando la gran cantidad de papel, de tinta y de toner que se gasta inútilmente en el Ayuntamiento. Hoy en día existe la posibilidad de trabajar con documentos digitalizados, evitando fotocopias innecesarias, lo que redunda en un ahorro para el Ayuntamiento y un beneficio para la sociedad en general. Pero no hay nadie en nuestro municipio que se tome en serio estas cuestiones.
En mi carta a los Reyes Magos les voy a pedir un poco de sentido común para nuestros gobernantes, para que la innovación no se quede en esta App anunciada, para que la modernidad sea la regla y no la excepción, para que se haga un uso racional de los recursos económicos, y para que se implante y se difunda la posibilidad de relacionarse con la administración a través de estas nuevas tecnologías.