En una sociedad como la nuestra que llevamos dos meses, por decirlo de alguna manera y sin anestesia, sin un gobierno que echarnos al coleto, se podría pensar que estamos todos preocupados por nuestro futuro más inmediato, que parece de todo menos luminoso.
Sin embargo, es más que evidente que hay en el ambiente, una especie de bipolaridad en la que unos apenas pueden vivir, y otros presuntamente de izquierdas, firman con la derechona de toda la vida pasada por un tamiz de savia nueva, pero eso sí, vestida de traje, con una sonrisa de nuevos sueños, buenas maneras y ninguna arruga, mientras intentan que olvidemos el pasado, quizás porque ellos mismos tienen mucho que ocultar, por aquello de dime de dónde vienes y te diré quién eres.Esa presunta bipolaridad apuntada más arriba, ha golpeado hoy la cara de este vecino del mundo, al comprobar que estas semanas pasadas se ha erigido como “it girl”, por traducirlo de alguna manera como “chica tendencia”, sin ella saberlo además, Laura Matamoros, hija de Don Kiko, uno de los baluartes de la televisión cocinada por esa “Cadena Alegre”, y que lleva ya casi dos meses enclaustrada en “Gran Hermano Vip”.
Curioso es también además. que esta prenda la lleva uno de los personajes más controvertidos de esta edición, y que destila bilis más que perfume de paz. Por lo cual, se pudiera desprender que nuestra sociedad le quita el sonido a la vida; más voyerista, de devorar imágenes y de “disfrutar” de lo que su ojo ve, pero no de analizarlo. Más del traje y de las maneras de un Pedro Sánchez o de un Albert Rivera, que de su discurso, y que ellos lo saben, ya que quedó más que patente en ese acto que se sacaron de la manga para “fidelizar su relación”, y que sonaba más a “¿Prometes serle fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad…” que a fórmula de sacar a un país adelante”.
Cualquier día de éstos, y ya acabado el concurso de Laura Matamoros, nos podemos enterar que Pablo Iglesias la intenta fichar para su partido morado como asesora de imagen, aunque seguro que Don Kiko, padre de la nueva it girl, le explica que no le conviene ese fichaje, ya que el de la coleta, es más que probable que sea, para su padre, el representante del demonio en la tierra…
Es lo que ocurre cuando se ve pero no se escucha.