En el siguiente enlace ( Prensa Libre) se muestra la noticia lamentable para algunos, agradable para otros. Actualmente en Guatemala, estamos en el tiempo de campaña electoral y los problemas religiosos en estos temas, se dejan ver aún mas. Realmente se respira un clima de hipocresías, violencia, y oportunistas. No son todos, pero bueno... esto ya es costumbre.
Al señor Harold Caballeros ex-pastor de la iglesia El Shaddai, un hombre muy respetable y estudiado, le están denegando la inscripción como presidenciable aquí en nuestro país, aunque al parecer, aún puede presentar otro recurso a su favor.
Según se sabe el Registro de Ciudadanos en Guatemala rechazó la inscripción del señor Caballeros, candidato a la presidencia por la alianza Viva y Encuentro por Guatemala. El argumento radica en que el artículo 186 de la Constitución Política de Guatemala, prohíbe proclamar a los ministros de culto o religiosos como candidatos a futuros presidentes de la nación. Aunque eso es bastante discutible ya que el artículo es muy pobre en cuanto a interpretación.
Yo personalmente no apoyo como candidato al señor Caballeros, aunque reconozco la capacidad como intelectual que este candidato posee. Academicamente admito que esta muy bien preparado. Y esto puede resultar como publicidad gratuita, aunque eso de la política ahora no me interesa.
En otra noticia alguien opina lo siguiente:
El pastor Jorge Morales, presidente de la Alianza Evangélica de Guatemala, afirmó que cuando Caballeros renunció al pastorado, se convirtió en laico, al referirse al fallo del Registro de Ciudadanos, cuando señala que Caballeros renunció como ministro de culto para buscar la Presidencia del país. "Un pastor deja de ser pastor cuando ya no ejerce; allí queda como una persona laica. La labor del pastor es creer en un llamamiento. Si me dijeran que fuera candidato a alcalde de donde vivo, no lo aceptaría, porque mi llamamiento es el de servir", agregó.
Ahora bien yo me pregunto...
¿Dios realiza o hace llamamientos? ¿El llamamiento es irrevocable? ¿Puedes renunciar siempre y cuando Dios te ofrezca algo mejor?
Con todo esto no quiero enfocarme en las decisiones que el señor Caballeros escogió, ya que esto ya ha sido muy discutido en mi país en otras ocasiones, y yo personalmente respeto su decisión y se que posiblemente hace esto solo con el animo y espíritu de servicio hacia la patria, ya que es difícil involucrarse en un terreno tan hostil como lo es la política. Que bueno que dejo de ser pastor, para buscar ser presidente, eso aporta mas valor a la nación. Aunque, personalmente si critico el hecho de que su esposa se quedo a cargo del culto religioso. Fue muy buena estrategia, según tengo entendido todo dirigido por la mano de Dios, aunque hubiese sido mejor que alguien neutral estuviese al mando de esa iglesia, para demostrar que ellos no tienen ninguna potestad en dicha organización, pero bueno... es solo mi opinión.
Lo único que quiero cuestionar es la posición de Dios en todo este asunto. Primero le hace un llamamiento divino y espiritual a este hombre para que renuncie a todo, su profesión y trabajo, y que entonces enseñe su mensaje de salvación y pastoree a su pueblo, dedicándose a tiempo completo a este nuevo estilo de vida.
Pero después parece que Dios cambia de opinión y le indica que el camino indicado es que participe como candidato para presidente de esta nación, según parece recibe la revelación cuando esta preparando una tesis de un colega en Harvard.
Hace 4 años el plan dirigido e inspirado por Dios no funciono, y en esa ocasión las puertas a la candidatura se cerraron completamente. Ahora nuevamente esta sucediendo lo mismo. Y muchos de seguro en defensa de Dios dirán que El tiene sus propósitos y planes misteriosos, que El obra de maneras que no podemos entender, o quizás la salida mas fácil, que estos estorbos de seguro son algunas artimañas del Diablo, o que simplemente jamas lo entenderemos, y supongo que eso es una buena forma de acallar la conciencia, al no encontrarle explicación a todo esto.
Si Dios controla es destino, parece ser que las cosas no salen como El quiere. Ya que unos simples mortales humanos, en el gobierno de un país pueden arruinar sus planes. Posiblemente por la hipótesis de que Dios tiene que respetar sus propias leyes, aunque no siempre las respeta y eso se justifica con su Soberanía.
¿Para que quiere Dios que su escogido sea presidente, si de todos modos nada resulta como lo esperado?
¿A cuantas mas personas Dios les habla indicándoles que es, lo que El quiere para sus vidas?
¿Y cuantos seres humanos más estarán escuchando la voz de Dios, diciéndoles a cada uno cosas distintas, opuestas, contradictorias y muchas veces sin sentido?
¿Y tú realmente escuchas la voz de Dios?