El producto ícono de los 10 años de Le Makeup de Givenchy elegido para este mes es Le Rouge. El nuevo Le Rouge Á-Porter tiene una fórmula similar a la de un bálsamo pero aporta el color de un labial.
El estuche es similar al de Le Rouge tradicional, revestido en cuero y con las tachas piramidales inspiradas en las colecciones de moda de La Maison, pero esta versión es más fina y alargada. La barra también es un poco diferente al tener su punta chanfleada.
El labial es bien pigmentado y cremoso, pero a la vez es súper ligero. Se siente como bálsamo y se ve como rouge. Cuando se coloca sobre los labios, se desliza muy fácilmente, dejándolos súper flexibles, como si no tuviéramos puesto nada. Además del color, protege los labios (lo mejor para este invierno, ya casi no uso bálsamos incoloros) y los trata, ya que en su formulación tiene aceites ultrafinos, esferas de ácido hialurónico y ceras microcristalinas. Todo esto le permite durar muchas horas (en el caso del color que tengo, los pigmentos quedaron durante varias horas aunque haya bebido o comido algo).
Hay 16 tonos disponibles, pasando de los nudes a los más intensos, de los naturales a los sofisticados. Mi preferido es y será, por los siglos de los siglos, el rojo, pero hay muchas opciones: Les Naturels son los beige empolvados y marrones suaves; Les Roses van desde el rosa claro hasta el coral y, por último, Les Créations, los colores más audaces. El precio es $580 y ya está a la venta en todos los counters de la marca.
En la reunión que tuve hace unos meses con el maquillador internacional, Dominique Lehongre, él me contaba que la mejor manera de destacar los labios es usando este dúo, porque el mejor amigo de este labial es el Mister Light, el iluminador en lápiz.
Dominique me contó que, después de la base, hay que colocar Mister Light alrededor del labio, no para borrar los contornos, sino para iluminar la zona (hay otra técnica que incluye borrarles los bordes, que no es la misma que ésta). Una vez aplicado, tanto arriba como en el centro del borde inferior, se funde con la piel mediante pequeños golpeteos.
Para aplicar el labial, sobre todo si es de un color intenso y no tenemos (o queremos) usar lápiz delineador, el truco es realizar una X en el centro del labio con la punta biselada para que se marque bien el arco de cupido (esa zona con forma de V) y el borde inferior. Una vez marcados, podemos rellenar con la misma barra sin necesidad de una brocha. Si el pulso les jugó una mala pasada, pueden corregir pasando Mister Light para "borrar" errorcitos.
Dúo dinámico para labios increíbles. ¿o no?