Lección de Historia: '71 fragmentos de una cronología del azar'

Publicado el 21 julio 2011 por Fimin

Hoy jueves, dedicamos la lección de historia a la útima entrega de la trilogía de la glaciación emocional iniciada por Michael Haneke en "El séptimo continente" y continuada por "El vídeo de Benny." Al igual que hizo con sus antecesoras, el realizador austríaco vuelve a poner el dedo en la yaga aterrorizándonos con un crudo y austero retrato de la sociedad contemporánea, es decir, una supuesta sociedad del bienestar que da pie a "71 fragmentos de una cronología del azar." Para el director de "Caché" resulta un mundo banal y silencioso; para los protagonistas, la vida cotidiana. Para nosotros, en cambio, una experiencia tan gratificante como perturbadora. Os dejamos con ella.

LA HISTORIA DICE

A través de noticiarios se nos informaba, hace prácticamente dos décadas, de un crimen que convulsionó el (primer) mundo durante los años 90. En la víspera de navidad, un joven de 19 años mataba, sin motivo aparente, a las personas que se encuentraban en su camino. ¿Existía algún vínculo entre las víctimas y el asesino?

LA PELÍCULA CUENTA

Michael Haneke radiografía la (supuesta) sociedad del bienestar a través de un mosaico que nos traslada un gran caleidoscopio en el que observa de manera distanciada a personajes de diversa procedencia y carácter. La forma en que la cámara los filma da la sensación de un ojo vigilante, omnipresente, algo así como el "Gran Hermano" de la icónica novela "1984" de George Orwell, con la pequeña diferencia que en este caso, ni condena ni juzga. La frialdad y distancia casi clínica con que Haneke observa a sus personajes no impide, sin embargo, que nos involucremos en el transcurrir y devenir de cada uno de ellos. Lo hace como marca su estilo, con un acentuado empleo de la cámara fija, el continuado uso de  prolongados planos secuencia (entre los que podemos encontrarnos con una conversación telefónica de 9 minutos o la mítica auto-partida de pingpong de más de 3 minutos) interseccionados por largos fundidos en negro y con largas secuencias que no admiten más de dos, o como mucho, tres escenas por cada una de ellas. El mayoritario rodaje en interiores reducidos acentúa, aún más si cabe, esa perturbadora y asfixiante atmósfera que tanto distingue el magistral cine de Haneke. Enm definitiva, sun cine que sugiere más de lo que muestra.

QUIÉN ESTÁ DETRÁS

"La cinta blanca, ""Caché," "Funny Games," "La Pianista," "El vídeo de Benny"...en fin, Michael Haneke, un auteur, una Palma de Oro con mayúsculas, que no ha cesado de desempolvar, de forma tan obscena como magistral, los elementos contradictorios de una sociedad del bienestar en la que la opulencia siempre esconde lo siniestro.

ALGO ASÍ COMO

Elephant + Vidas Cruzadas