¡Muy buenas!
Creo que ya lo he comentado en alguna entrada anteriormente, y es que en verano leo todo lo que no puedo durante el año. A pesar de que ha sido un mes de julio un poco liado he leído 10 libros, y la gran mayoría han sido unas buenas lecturas y he conseguido reducir mi lista de pendientes bastante.
La plaza de los pintores, Gloria Losada (editorial Kiwi) (2/5). Me llamó mucho la atención su portada pero no fue lo que esperaba, no me convenció. Aquí podéis saber con más detalle qué me pareció.
Dame otro mes soltera, Lidia Herbada (4/5). Había leído su primera parte aunque son independientes y esta última me encantó, especialmente por los personajes. Aquí tenéis la reseña.
Pomelo y limón, Begoña Oro (editorial SM) (4/5). Tenía muchas ganas de leer algo de esta autora y este libro me ha gustado, aunque es una historia normal la autora, a través de su estilo, consigue que llegue, seguramente leeré más de ella.
Un hotel en ninguna parte, Mónica Gutiérrez (4/5). Lo compré porque tenía valoraciones en Amazon muy positivas y no me ha defraudado, está escrito de una forma especial, dentro de poco tendréis la reseña.
Con Empezar de nuevo (4/5) y Nunca es tarde (4/5) acabé todos los libros pendientes que tenía de Isabel Keats. Es una autora que me encanta, es de mis favoritas en romántica por su forma de escribir, que es sencilla pero amena y con unos protagonistas, sobre todo los masculinos, que enamoran.
Y por último, una de las sagas que más ganas tenía de empezar. La había dejado para verano porque sabía que si empezaba a leerla no iba a parar y así fue, aunque me spoilearon el final. Al principio no podía evitar compararla con Los Juegos del Hambre pero no tienen nada que ver, os contaré más en las reseñas.
Aunque este mes he tenido lecturas bastante buenas, me quedo con la saga Divergente porque me ha parecido diferente a lo que leo normalmente, lo leí prácticamente en un fin de semana y tanto los personajes como la trama en general, que tenía mucha intriga y acción, me encantaron.