Equipado con un paracaídas, el ciclista de Red Bull realizó complejos trucos en el primer bowl colgante del mundo, construido con el mismo material de un auto de Fórmula 1.
Una vez más la estrella de BMX a nivel mundial, Kriss Kyle (31), empujó los límites de lo posible y sorprendió al mundo tras montar su bicicleta en el lugar menos pensado: un bowl diseñado por ingenieros de la Fórmula 1, colgado de un globo aerostático a 610* metros en el aire.
La hazaña, capturada en el video titulado “Dont Look Down” y grabada el 22 de marzo en Bedford, Reino Unido, es uno de los grandes sueños de Kyle, ciclista escocés de 31 años y estrella mundial de BMX, y es parte de su cruzada para motivar a las generaciones más jóvenes a subirse a la bici y probar esta emocionante.
Tres años de preparación tardó el proyecto, donde el atleta trabajó de la mano de Red Bull Advanced Technologies (RBAT), la rama tecnológica del equipo de Oracle Red Bull Racing, para crear un bowl de fibra de carbono construido con el mismo material que un auto de Fórmula 1, de 1,7 toneladas. Al mismo tiempo, el globo aerostático era 6 veces más grande que uno normal, para poder sostener el aún excesivo peso del bowl.
A pesar de su miedo a las alturas, el atleta de Red Bull decidió seguir adelante con el proyecto, y empujar la búsqueda de cumplir su sueño. “He querido realizar este proyecto durante mucho tiempo, pero el factor de altura siempre lo he sentido como un peso enorme en mi mente”, dijo Kyle. “He tenido que superar mis miedos muchas veces para otros proyectos de Red Bull, pero nada se compara como esto. A 610 metros estás tan alto que casi no se siente real”, agregó.