Atentos a lo que dice un referente del socialismo moderno: “Vox viene exhibiendo, más que cualquier otra cosa, su voluntad de poner en evidencia los agujeros y abandonos que ha traído consigo la ideología políticamente correcta, como son la inmigración ilegal y las imposiciones del feminismo radical”.
A sus 77 años Joaquin Leguina es respetado por su visión universalista. Tuvo cargos importantes en el PSOE previo a Rodríguez Zapatero, con el que chocaba, como haber sido el primer presidente de la Comunidad de Madrid, aunque antes de entrar en política tenía ya una notable carrera académica y laboral como demógrafo y economista.
“El éxito de Vox se debe a su ataque directo al corazón de la corrección política, que es una ideología censora, buenista y radical que ha invadido no sólo a la izquierda, también al conjunto del debate político”, acaba de escribir en el diario madrileño ABC.
“Fomentar la reindustrialización de España, crear un dispositivo del primer empleo que exonere de las cargas sociales en las contrataciones de jóvenes, una concepción integral de la sanidad”, son demandas de sentido común.
Muchas propuestas útiles, como la de “crear un nuevo Plan Hidrológico Nacional bajo el principio de solidaridad y el bien común”, están olvidadas o desechadas por otros partidos, centrados en debates identitarios.
Por tanto, “el éxito de Vox en Andalucía no se debe tanto a sus posiciones, diz que de extrema derecha, simplificación que muchas de sus propuestas desmienten”, como a la demanda social.
A su juicio Vox aprovecha un vacío “porque todas las luces apuntan casi en exclusiva a los problemas identitarios, ya sean de separatistas o de feministas radicales”.
Conclusión: “como es lógico, tales simplificaciones y mentiras traen consigo rechazos silenciosos pero masivos, auténticos caladeros electorales para Vox”.
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SALAS