Autor: Thomas HardyEditorial: AlbaISBN: 84-84281558Nº de páginas: 584Título original: Far from the Madding Crowd
Bathsheba Everdene, una muchacha con una sonrisa «de las que sugieren que los corazones son cosas que se pierden y se ganan», hereda, a la muerte de su tío, la mayor granja del pueblo de Weatherbury. Tres hombres rondan a esta joven propietaria, «fuerte e independiente», que sin duda está en situación de elegir: el pastor Gabriel Oak, empleado suyo tras un desafortunado intento de independizarse, y que padece con silencioso aplomo su diferencia de posición; el hacendado Boldwood, un rico y maduro solterón, algo oscuro y poco delicado, pero capaz de amar con una intensidad imprevisible; y el sargento Francis Troy, apuesto, acostumbrado a los favores del mundo, conquistador. Bathsheba puede elegir, pues, y elige… aunque en poco tiempo habrá de descubrir que ha renunciado «a la sencillez de su vida de soltera para convertirse en la humilde mitad de un indiferente todo matrimonial». Nunca me había animado a leer nada de Thomas Hardy. No sé exactamente por qué; quizá porque me habían comentado que era un autor duro, oscuro y que sus novelas no eran demasiado optimistas.Supongo que no todas serán como ésta, pero debo admitir que la he disfrutado un montón. ¡Qué bien escribe este hombre! ¡Cómo describe! ¡Qué uso del lenguaje! Sí, sí, ya sé que me dejo llevar un poco pero es que como ya he dicho el autor me ha sorprendido gratamente y me lo he pasado genial desde la primera a la última página. Imaginaos estar viendo un culebrón de época. De esos con muchas desgracias, personajes que sufren en silencio, atormentados por una amor no correspondido; mujeres valientes e independientes, hombres rudos.... todo en un ambiente tan bucólico como el de la campiña inglesa. Pues esta novela tiene todo eso y más. La protagonista de esta historia no es Bathsheba Everdene aunque pueda parecerlo. El verdadero protagonista, en mi opinión, es Gabriel Oak, un hombre sencillo que conquista y al que en seguida el lector cogerá cariño.Y es porque al pobre Gabriel le pasa de todo en pocos años pero siempre afronta lo que le viene encima con entereza y actitud positiva.Enamorado de Bathsheba pronto descubre que su amor no es correspondido. De otro lado está, como no, la chica, la famosa Bathsheba, que a pesar de su feo (eso lo digo yo) nombre, es una mujer que va rompiendo corazones allá por donde pasa. Bathsheba sin embargo es joven y algo veleidosa, y como todas las jóvenes, cree en el verdadero amor y en el perfecto príncipe azul. Cerrando el círculo están los otros dos hombres de este singular trío de pretendientes: el sargento Troy, joven guapo y ambicioso, con poco cerebro y mucha labia, y el terrateniente Boldwood, hombre maduro, solterón empedernido que pierde la cabeza por nuestra jovencita. Todo este "drama" se desarrolla en una Inglaterra rural, con sus pastos, sus ovejas, sus pastores, granjas y demás paisajes perfectos. Aunque la historia en sí puede parecer simple Hardy consigue darle una vuelta más.Bathsheba se nos muestra aquí como una joven adelantada para su época, no sólo por su manera de actuar, queriendo ser la dueña de su vida y su destino, sino de pensar. El autor no sólo hace una profunda radiografía de los personajes y sus diferentes caracteres sino de la sociedad y las costumbres de la época. En definitiva, novela amable y entretenida para quienes gusten de la literatura del siglo XIX.