Les voy a contar - Diarios I
Éstos son los diarios de un político nada frecuente, José Bono, protagonista y testigo del poder durante más de tres décadas. El autor, buen conversador, que disfruta en el trato con los demás, decidió, a principios de 1992, tomar buena nota, cada día, de cuanto vivía, escuchaba, observaba y sentía. El resultado es casi un acta notarial, en la que Bono lo cuenta todo… de todo y de todos.
En este libro, desde la primera línea, todo son revelaciones, todo es inédito, todo es sorprendente…
El agrio desencuentro del autor y de Felipe González con Guerra, la oferta de la vicepresidencia del Gobierno a Suárez por parte de Felipe, los recuerdos de la Reina sobre Franco, el uso de los fondos reservados para fines muy reservados, lo que cuesta, en millones, “ser bien tratado” por los medios…, la pesadilla de la corrupción, la huida de Luis Roldán que a punto estuvo de ser ministro de Interior…, cómo se vivió y gestionó el caso GAL en Moncloa, el berrinche del juez Garzón al no ser nombrado ministro…, las conversaciones con Mario Conde, que pensó afiliarse al PSOE…, con fino humor y aun con ternura, el autor no ahorra anécdotas, como la del cura de los condones que captaba votos para el PSOE, la curiosa selección de “los mejores huesos” para la tumba de Quevedo, la lista de asistentes al entierro de don Juan hecha por él mismo, la cabra del obispo de Almería muerta por indigestión de Concordato, o los huevos fritos reclamados con urgencia por la hermana del Rey la noche del 23-F.
Desde el estricto compromiso con España, Bono aporta las claves para saber cómo y quiénes forjaron nuestra historia reciente y desvela sin dobleces o fingimientos, pero sin dar pábulo a la maledicencia, sus zonas oscuras.
“Les voy a contar”, de José Bono, es el primer volumen de su diario personal, que abarca el día a día desde 1992 a 1997.
Ningún político español vivo, de la relevancia de José Bono, ha realizado un trabajo tan impresionante sobre su propia actividad, sus conversaciones y sus contactos a lo largo de un periodo tan dilatado, de casi veinte años. El material de origen es un diario que comprende 17.000 páginas de ordenador y este volumen supone un 10 por ciento del total manuscrito.
El autor ha seleccionado parte de esas anotaciones diarias, que no debe ser tachada de parcial puesto se convierten en un testimonio de una época vivida intensamente por quien ha sido, en ese tiempo, presidente de Castilla-La Mancha, dirigente socialista, candidato a la presidencia del PSOE, ministro de Defensa, Consejero de Estado y presidente del Congreso de los Diputados. El contenido, en su mayor parte, preserva todo lo que ha tenido más interés nacional.
El inicio: Todo comenzó cuando en abril del 1992, el presidente del PSOE, Ramón Rubial, le animó a escribir sobre una experiencia de la que le había hecho confidente.
Se iniciaba un diario que llegó hasta el 12 de diciembre de 2011, fecha en la que dejó la presidencia del Congreso de los Diputados. Hasta entonces, José Bono escribió todos días y siguió siempre la misma metodología: notas en el bloc, dictado de las mismas a una grabadora y transcripción de su secretaria a un ordenador.
Ejercicio de justicia: Para José Bono, este libro no es un ejercicio de prudencia. Pero sí puede ser un ejercicio de justicia, al menos de justicia con la verdad. Y con estos diarios pretende “proporcionar claves para entender mejor los acontecimientos políticos que nos han afectado como país y como ciudadanos”. El objetivo es levantar acta, sin cortapisas ni autocensuras, de lo que ha vivido y de aquello de lo que ha sido testigo.
“Les voy a contar” es un trepidante viaje a la apasionante vida política del autor. Ha sido testigo y protagonista de momentos cruciales de la política española. Y el libro es un diario con un texto “netamente político” en el que no cuenta nada relativo a su esfera personal o familiar. El autor quiere con este diario reivindicar la política.
Reivindica la política como un menester digno, como un afán de hacer bien las cosas.
Y los define como lo que son, diarios, que no memorias, porque aquella palabra tiene un carácter “notarial (…), se cuentan hechos. Es un diario político que se inició y se redactó con vocación de testimonio”, mientras que unas memorias siempre evocan recuerdos. Y quiere que el lector sepa que “no comencé a escribir para justificar mi actividad política, ni para ganar votos, sino para dar fe de lo hecho, de lo visto y de lo escuchado”.
Ejercicio de transparencia: Este primer volumen recoge la época que discurre desde el esplendoroso año 1992, el de los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Expo de Sevilla, a la caída del PSOE y la llegada de José María Aznar al Gobierno, en 1997. Una época en la que se pasa del triunfo socialista a la ruptura entre Felipe y Guerra, de la victoria a la derrota en las urnas que supone la llegada del Partido Popular al Gobierno de la nación.
Un texto que no dejará indiferente a nadie, porque lo cuenta todo, sin cortapisas ni censuras y en el que habla y recoge opiniones sobre el Rey y la Reina, Felipe González, Guerra, Narcís Serra, Rubalcaba, Almunia, Leguina, Adolfo Suárez, Calvo-Sotelo, Carrillo, Pujol, Maragall, Aznar, Fraga, Fidel Castro… Baltasar Garzón, Mario Conde, Jesús de Polanco… los cardenales Tarancón y Marcelo González… entre cientos de nombres.
El autor de “Les voy a contar” define la redacción de estas páginas como “un ejercicio de transparencia, de mostrar a mis conciudadanos cómo somos y cómo actuamos los políticos y otras personas con responsabilidades públicas, más allá del relato oficial o incluso de las noticias que recogen a diario los medios de comunicación”.
José Bono, que ha ganado seis elecciones consecutivas por mayoría absoluta, se define como un político “autónomo”, que en muchas ocasiones ha ido en contra de su propio partido. Que los políticos sean autónomos es condición necesaria para incrementar el valor de la política”.
Además, reflexiona sobre los políticos y su relación con los ciudadanos: “Esa parece ser la regla: agradar a su superior, pero a los ciudadanos y sus necesidades es al que hay que atender. Para ser ministro debería ser obligatorio haber pasado antes por una alcaldía o una concejalía, aunque sea de aldea. Los despachos de los ministros están muy alejados de las preocupaciones cotidianas” porque están más preocupados del partido que de las cosas de los ciudadanos.
Preocupación Real: La figura del Rey le ha supuesto una preocupación. ¿Cómo tratar al Rey?, ha optado por decir la verdad con alguna reserva de carácter personal que, por el momento, no publicó. Lo que aquí se publica no cuestiona la figura del Rey y menos de su persona. Es cierto que a algunos cortesanos les molestará algo de lo que se dice.
Introducción y epílogo: Este es el primer volumen de tres que tiene escritos. Los otros son “El diario del ministro de Defensa (2004-2006)” y el último recogerá el periodo de la presidencia del Congreso de los Diputados (2008-211).
Todos los capítulos del libro, que corresponden al periodo 1992-1997, llevan una introducción en la que el autor sitúa en el tiempo los acontecimientos nacionales e internacionales más importantes que sucedieron en cada uno de los años recopilados.
Asimismo, incluye un epílogo y, haciendo una excepción, el autor ha forzado un salto en el tiempo con el “propósito de posarme en dos fechas con las que llegar al ecuador de mi vida política y en las que se produce un punto de inflexión (…): la celebración de las elecciones primarias que marcaron un antes y un después en el PSOE, en abril de 2008.
La otra fecha coincide, en mayo de 1999, con la dimisión de José Borrell, como candidato a la presidencia del Gobierno, y el ofrecimiento de Joaquín Almunia y Felipe González a que yo fuese el candidato”. Todo desembocará en marzo de 2000, “en mi presentación al cargo de secretario general del PSOE, en el Congreso Federal que se celebró un año después”.
Compatibilizó su militancia política con la participación activa en movimientos cristianos progresistas (FECUM).
Fue profesor de Ciencia Política en la Universidad Complutense y ejerció como abogado, defendiendo a luchadores antifranquistas ante el Tribunal de Orden Público. Ha sido diputado a Cortes por Albacete (legislaturas de 1979 y 1982) y por Toledo (2008-2011). Presidente de Castilla-La Mancha durante veintiún años, de 1983 a 2004, tras vencer por mayoría absoluta en seis elecciones consecutivas.
Ministro de Defensa (2004-2006) con el primer Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y consejero de Estado (2006-2008).
En 2008 fue elegido presidente del Congreso de los Diputados, responsabilidad que ejerció hasta finales del 2011.
Es autor de numerosos artículos y varios libros, entre los que destaca A vueltas con el futuro (1995), un ensayo sobre el papel del socialismo democrático.
Tiene tres hijas y un hijo y, tras el cese de su actividad política, ejerce profesionalmente como abogado.