Letras y Viñetas (121): "Píxeles", humor al cuadrado (o con cuadrados)

 Así luce la portada, no hace falta más.
Ir a salones y eventos de cómic es siempre una aventura, terminas con alguna (o más) historias a las espaldas y en muchas ocasiones huyendo de los que te asaltan con sus fancines aunque no te interesen, pero a veces se te cruza un tipo vestido de Rincewind y te da historietas protagonizadas por píxeles (tal cual lo cuento) con las que, sorpresa, te ríes.
A un clic os cuento un par de cosillas de “Píxeles”.
El humor es algo increíble, cambiante y que puede tocar todos los niveles de la realidad, o de la fantasía pura que todo es ponerse, partiendo de algo existente y usarlo como una plataforma para contar lo que te molesta, criticar la sociedad en la que vivimos o directamente tirar por el absurdo y tomarte todo con una buena carcajada.
Presentado por “Ruleta Rusa” y de la mano de Timoneda, conocido de mis tiempos en el foro de “Los seguidores del Ni”, llega este muy pequeño tomo en un regio blanco y negro (bueno... son píxeles, no hay nada mejor para ellos, con alguna excepción) en el que durante las páginas que lo componen tendremos una muestra del ingenio y sátira de su creador, dejando claro que para hacer una obra que entretenga no hace falta tener un gran capital o pasar por el aro una enorme distribuidora.
Esto es sin duda un puro experimento de abstracción, dependiendo en gran medida de la decisión del público para creerse que dos cuadraditos negros pueden tener tanta historia detrás y entrar en un juego que le llevará a tener un rato con una sonrisa permanente en la boca. No he podido evitar pensar en las tiras de “Darkness” (si no me falla la memoria), en las que lo único visible eran los ojos blancos de sus protagonistas contra un fondo siempre negro, este “Píxeles” haciéndolo de forma inversa (negro sobre blanco) pero que en líneas y complicidad del lector bien podía considerarse un precedente.
Al terminarlo solo tuve una duda y era ¿cuándo una editorial se lanzará a publicarlo en mejores condiciones?
Para completar me ha parecido buena idea poneros directamente las palabras de Timoneda, hablando de su obra:
“La idea se me ocurrió mientras meaba. No sé por qué, pero fue así. Pensé en hacer unas tiras en que los protagonistas fueran píxeles, y que sólo se vieran unos puntitos hablando. Luego también pensé "vaya chorrada" y descarté la idea. Pero siguió por mi cabeza y acabé sacándolo y colgándolo en mi fotolog. (¡Fotolog! ¿Alguien lo recuerda? ¡Qué tiempos aquellos!). Y resulta que a la gente le hizo gracia la cosa, y seguí.
Empecé a hacerlos para colaboraciones en fanzines como Andergarún o Pandora's Box, y a publicarlos mensualmente en la revista Le Potage donde llegaron a ocupar una portada, que por error mío al maquetar no sale en el libro, y que causó un cierto revuelo, porque hubo a quién no le gustó que fuera una página en blanco con dos cuadrados negros hablando. Fue divertido.
Y bueno, con toda esta historia detrás, nos pareció que editarlo íntegro (más o menos) en un libro de 100 páginas y en formato cuadrado, era un buen cierre para esto. No significa que sea un final, pero claro, sin Le Potage no es lo mismo.
Y eso, es un libro muy bonito, con muchas chorradas, tiras inéditas, y lomo cosido, que es algo que nos gusta porque aunque sea algo más caro, no se le caen las páginas como a los tomos de Scott Pilgrim. ¡Buena la liasteis con eso, Random House! Y esa es la historia de Píxeles. Así de sencillo, así de cierto. Tendríamos que haberles puesto solapa a la cubierta con este texto. O no”.