Según narra la leyenda, el duque Gediminas, quien vivía en Trakai, estaba cazando entre los ríos Vilnia y Neris. Persiguiendo a un oso se extravió en el bosque. Quedó nuestro duque dormido en una colina y soñó con un lobo de hierro que aullaba como una manada.
Un adivino de nombre Lizdeika interpretó el sueño. Gediminas debería fundar en ese lugar una ciudad tan invencible como aquel lobo. Los aullidos que escuchaba significaban que esa ciudad sería famosa y renombrada por siempre. La llamó como uno de los ríos donde estaba cazando, el Vilnia.